Estoy en el liceo y el año que viene me paso a otra escuela. Primero me sentí preocupado, porque iba a perder a mis viejos amigos e iba a tener que hacer nuevas amistades. Pero cuando lo pensé mejor, vi que si tan sólo expreso las cualidades divinas (como el amor, la verdad y la sinceridad), los demás se van a sentir atraídos por esas cualidades y, por lo tanto, por mí. Lo bueno es que ahora mismo puedo expresar más la bondad, la alegría y el amor de Dios. De modo que cuando pienso en ir a mi nueva escuela, ya no me preocupa tener que hacer nuevos amigos. Y eso me hace sentir muy bien.: )
Tulsa, Oklahoma, EUA
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