Las noticias que se han difundido últimamente sobre las gigantes corporaciones como Enron, MCI WorldCom, y otras, me han llevado a orar para Encontrar una respuesta sobre la cuestión del poder que tienen las corporaciones y la manera en que éste se utiliza. Ocupo un puesto ejecutivo y me he dado cuenta de que tengo la responsabilidad de ser un ejemplo del comportamiento que quiero que la organización para la que trabajo adopte como modelo, y esto incluye mantener prácticas comerciales y contables honestas y éticas.
En 24 horas conseguí un nuevo trabajo y un lugar para vivir.
Los ejecutivos de las grandes empresas no comienzan su carrera con el deseo de engañar, dar información falsa ni destruir los ahorros de toda una vida de sus empleados. No obstante, la percepción de que es necesario mantenerse competitivos, satisfacer a los accionistas, y aumentar las ganancias a toda costa, los puede llevar a utilizar prácticas comerciales inapropiadas.
Iniciar sesión para ver esta página
Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!