Recientemente la gente se ha comunicado con la Junta Directiva de la Ciencia Cristiana y con la Administración Fideicomisaria consultando sobre la forma de celebrar servicios religiosos que siguen el orden establecido en el Manual de la Iglesia, pero que se desvían de las formas tradicionales a las que estamos acostumbrados. Afortunadamente, ninguno de nosotros tiene que crear normas que indiquen qué significa formar parte de la Iglesia de Cristo, Científico. Mary Baker Eddy ya lo ha hecho cuando nos dice que el propósito de su Iglesia es "restablecer el Cristianismo primitivo y su perdido elemento de curación". Manual de la Iglesia, pág. 17. Cuando pensamos en lo que da a nuestra Iglesia su identidad y estructura, puede traer mucha tranquilidad y autoridad reflexionar sobre las palabras de Jesús que rodean emblema de la Cruz y la Corona en Ciencia y Salud: "Sanad enfermos, resucitad muertos, limpiad leprosos, echad fuera demonios". Es muy simple. La norma por la cual se mide nuestra Iglesia es si se están efectuando curaciones o no.
La Sra. Eddy sabía que era muy importante mantener puras las enseñanzas de la Ciencia Cristiana y un espíritu de adoración que promoviera la curación mediante la operación del Principio divino, no de la personalidad. Por lo tanto, ella fue muy específica acerca de ciertas cosas, como el hecho de que los miembros pueden organizar iglesias con el fin de "celebrar cultos religiosos en los que se lean las Escrituras y el libro de texto de la Ciencia Cristiana. Ibíd., pág. 72. Ella también indicó claramente que los lectores de estos servicios religiosos deberán leer de los libros, no de manuscritos, y que debe haber un orden establecido en el servicio, de manera que las personas puedan contar con un servicio religioso de la Ciencia Cristiana y reconocerlo como tal. Ella además explicó que los lectores de la iglesia "nunca habrán de añadir ningún comentario explicativo de la Lección-Sermón..." ibíd., pág. 32. Las numerosas declaraciones de la Sra. Eddy acerca de la Lección-Sermón, van dirigidas a una membresía que es fortalecida a través de un estudio en conjunto del número corriente del Cuaderno Trimestral de la Ciencia Cristiana. En otras cuestiones ella fue menos específica, tal como si los miembros de la iglesia se podían reunir y conducir programas informales después del servicio, o qué tipo de música se podía usar para los himnos, o lo que constituyen los anuncios necesarios y la lectura de la bendición.
Cuando escuchamos hablar de miembros que están explorando formas de agregar más vitalidad a sus iglesias, nosotros aplaudimos su energía y entusiasmo, al tiempo que los alentamos a encontrar su identidad esencial dentro de las actividades que nos dio nuestra Guía en el Manual. El factor más importante sigue siendo la norma que estableció Cristo Jesús: "Por sus frutos los conoceréis". Mateo 7:20. Las iglesias de la Ciencia Cristiana serán finalmente evaluadas por la medida en que se producen curaciones o no durante sus servicios religiosos. Y es probable que todos estaríamos de acuerdo en que una de las desviaciones más serias de las normas de la Iglesia sería que los miembros llevaran a cabo las etapas de un servicio religioso sin sentir el Espíritu de la Verdad y el Amor que realmente le da a nuestra Iglesia su forma tan única.
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