Queridos miembros de La Iglesia Madre:
Hace algunos años entré tímidamente a una sala de reunión en Austin, Texas, Estados Unidos, donde tres dedicados trabajadores de la oficina del Gerente de los Comités de Publicación de Boston me estaban esperando. Habían venido a hablar conmigo acerca del cargo de Comité para Texas.
Antes de la reunión, me había imaginado que tendría que discutir con legisladores y redactores, además de aparecer frente a cámaras de televisión procurando contestar preguntas difíciles. De modo que, sintiéndome algo abrumado, pregunté: “En concreto, ¿Qué hace un Comité?”.