Originales Web
Apareció primero el 11 de noviembre de 2024 como original para la Web.
Publicado originalmente en francés
El hecho es que Dios, la Verdad, ni lucha ni niega el error porque, al ser perfecto, el único poder y omnipresente, Dios solo se conoce a Sí mismo y a Su creación.
Apareció primero el 30 de diciembre de 2024 como original para la Web.
Estamos encantados de anunciar la nueva revisión de la traducción al español de Ciencia y Salud con la Llave de las Escrituras de Mary Baker Eddy. Esta traducción es la nueva edición autorizada y continuará fomentando la curación y el consuelo a todos los que la estudien.
Apareció primero el 18 de noviembre de 2024 como original para la Web.
Esta declaración de Ciencia y Salud fue una dulce promesa al considerar mi intachable integridad espiritual como hija de Dios: “La Ciencia divina del hombre está tejida en una sola tela consistente, sin costura ni rasgón” (pág. 242).
Apareció primero el 21 de octubre de 2024 como original para la Web.
Publicado originalmente en portugués
El colega que viajaba conmigo dijo que, durante esa conversación telefónica, yo estaba hablando como lo haría un padre al compartir las cualidades expresadas por un hijo.
Apareció primero el 11 de noviembre de 2024 como original para la Web.
Una de las cosas más importantes que estoy aprendiendo es que la obra de Dios ya está hecha y ya es espiritual, perfecta y presente. Así que mis oraciones no están cambiando algo, sino más bien discerniendo lo que Dios ha hecho.
Apareció primero el 28 de noviembre de 2024 como original para la Web.
Uno de los mensajes más dulces que recibí fue que no podía ser castigada por dedicar mi vida a Dios, ayudar y amar a mi iglesia y orar por los demás. Dios nos creó para ser libres y felices, y para sentirnos amados.
Apareció primero el 18 de noviembre de 2024 como original para la Web.
A pesar de los informes que llegan a nuestras pantallas sobre el delicado estado de la unidad mundial, la oración revela que, en el amor de Dios, todo lo que poseemos es la bondad que proviene de Dios.
Me di cuenta de que, en lugar de limitarme a decir lo que pensaba, era más importante escuchar a Dios y dejar que el Amor guiara mis palabras y acciones.
El Principio divino, la ley universal del Amor, tiene bendiciones infinitas para cada uno de nosotros. Obedecer el Estatuto de “La oración diaria” nos protege del temor, la obstinación y el egoísmo. Nos permite vivir y dar un afecto genuino y puro que tiene un fundamento espiritual.
A medida que abrimos nuestros corazones al mensaje de verdad del Cristo, vemos más de nuestra armonía inherente como los hijos espirituales de Dios.