
Relatos de curación
En el Salmo 107 (versículos 2 y 14) leemos: "Díganlo los redimidos de Jehová, los que ha redimido del poder del enemigo .
Mi niñez fue muy desdichada, y empecé a preguntarme, cada vez más, cuál era en realidad el significado de la vida. Aunque concurría a una iglesia cristiana y a una Escuela Dominical, con el tiempo comencé a sentirme muy insatisfecho.
En el año 1970 conocí la Biblia, que nunca había leído, si bien mi familia pertenecía a una determinada religión. La Biblia me la obsequió una compañera de trabajo.
Aun cuando era niña rehusaba creer que Dios, nuestro Padre, había maldecido a toda la humanidad a causa de las faltas cometidas por Adán y Eva. Finalmente, también perdí la fe en las medicinas materiales, ya que mis enfermedades reaparecían y no eran sanadas.
Estoy agradecida por el cuidado de Dios para con mi familia. He aprendido que su cuidado nunca está ausente y que nunca se acaba.
Hace ya muchos años, cuando era una joven madre con dos hijas, yo sufría de severos dolores abdominales. Los diagnósticos médicos variaban entre embarazos tubulares, quistes y útero malformado.
Cuando mis padres conocieron la Ciencia Cristiana yo tenía diez años, y la he practicado desde entonces. Hemos tenido toda clase de curaciones.
Cuando era adolescente, mis padres me enviaron a una academia militar. Esta escuela era famosa por su excelencia académica y estricta disciplina militar.
Quiero expresar mi gratitud a Dios por haber sido guiado a conocer la Ciencia Cristiana Christian Science (crischan sáiens) . Cuando tenía diez años, fui operado de apéndice.
Hace algunos años perdí dos embarazos. También pasé por un divorcio.