Segunda Iglesia, Burbank, California
Nuestra iglesia está situada en un cuartoalmacén largo y angosto a cuyo frente, sin tabique divisional, se mantuvo nuestra Sala de Lectura por siete años. Dada la distancia algo larga en que quedaba esa Sala de Lectura, había que buscarla, y pocos eran los transeúntes que la visitaban.
En Febrero de 1955, se nombró un comité que se encargara de buscar un local más útil y atractivo en que instalar nuestra Sala de Lectura. Con la ayuda moral y espiritual de los miembros de la iglesia, hallamos un local apropiado en una zona mercantil. Ese edificio quedó convertido en una Sala de Lectura de lo más atractivo por miembros de la iglesia con alguna ayuda profesional. Unos hombres de la congregación construyeron mostradores, mesas en que estudiar, alacenas y armarios para libros, así como un tabique separando la sala de ventas del cuarto en que estudiar. El aeroacondicionamiento asegura la comodidad durante el verano. El trabajo comenzó en Marzo, y se invitó al público a la apertura el 18 de Abril.
El horario aumentó de cuatro horas diariamente, seis días por semana, a nueve horas diarias con tres adicionales los viernes en la noche. Obreros bien dispuestos mantienen el funcionamiento bien ordenado de la sala.
Los amplios escaparates han sido arreglados de manera que se vea todo el interior de los lindos cuartos. Muchos de los que pasan se detienen a ver lo desplegado en ellos y a leer los libros abiertos. Ha aumentado siete veces el número de los visitadores. Las ventas han crecido, y hemos aumentado nuestros pedidos permanentes de las publicaciones periódicas.
Los siguientes sucesos revelan otros frutos. Un señor se detuvo a leer las citas de la Biblia y de “Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras” por Mary Baker Eddy, y luego entró a decir que cuando niño había concurrido a una Escuela Dominical, pero que después se había apartado de la Christian Science descarriadamente, pero que ahora deseaba comenzar de nuevo a estudiarla. Compró una Biblia, un ejemplar de Ciencia y Salud y un Cuaderno Trimestral de la Christian Science, y expresó su aprecio de nuestra Sala de Lectura.
Una señora entró a comprar un Cuaderno Trimestral y dijo que hacía dos años que había dejado de estudiar la Christian Science. Y dijo que, después de ver nuestra nueva Sala de Lectura, creyó bueno reanudar su estudio de la Biblia y de Ciencia y Salud.
Muchos visitadores han hablado agradecidamente de la belleza, comodidad, accesibilidad y más largo horario de la nueva Sala de Lectura.
Green Bay, Wisconsin
Por cierto tiempo los miembros de esta iglesia habían venido pensando en vena de oración en la adquisición de una Sala de Lectura situada en la planta baja. Un día el Gerente del edificio en que estaba ubicada nuestra Sala de Lectura en una planta alta, por varios años, presentó un plan que requería consideración. Al saber eso, los miembros de la iglesia pensaron en lo muy deseable que les sería la planta baja para su Sala de Lectura y votaron casi unánimemente aceptar el plan. Se nombró un comité de cinco para que se encargara de remodelar el cuarto escogido, y se dió principio a la obra.
Mucha gratitud se ha venido expresando por los modos y medios que se han presentado como resultado de la oración. El himno número 151 del Himnario de la Christian Science sirvió de mucho para reconcentrar el pensamiento en el deseo sincero de hacer la voluntad de Dios.
A medida que proseguía el trabajo, los miembros llevaban dádivas. Uno que no era miembro de la iglesia contribuyó con el cielo raso o techo acústico de la sala de ventas. Un arquitecto no Científico Cristiano donó su tiempo para consultas. Una tienda de departamentos local regaló un armario con vidrieras y una mesa para ventas. En cambio nuestra iglesia se alegró de obsequiar a la Asociación Cristiana de Jóvenes local un armario-vitrina en muy buen estado para exhibir objetos. La gerencia del edificio mudó los enseres de nuestra Sala de Lectura de la planta alta al nuevo local en la planta baja. Un hombre de negocios, vecino, ofreció desplegar y enrollar diario nuestra cortina-toldo. En cambio ha recibido muchos negocios de nuestros miembros de la iglesia.
El comité visitó muchas Salas de Lectura de la Christian Science y siempre recordará y agradecerá la ayuda y detalles de la experiencia de los encargados, que le proporcionaron amablemente. Huelga decir que la División de Salas de Lectura de La Iglesia Madre nos dió muchas ideas útiles.
Hace ya un año cumplido que nuestra Sala de Lectura ocupa el nuevo local. Las ventas han aumentado y muchos visitadores han utilizado la sala de estudio. Nuestro bien alumbrado escaparate atrae a muchos de los que pasan, incluso jóvenes. El interés y actividad acrecidos de la Sala de Lectura han unido más a los miembros, probando lo que con la unión puede lograrse.
En vista de que la Sala de Lectura en la planta alta no se prestaba para exhibir la literatura de la Christian Science, mucha gente ha comentado al notar nuestra nueva sala, que ellos no sabían que nuestra iglesia fuera tan activa. La comunidad se ha venido dando cuenta de “una influencia toda divina,” como dice el himno número 97 del Himnario de la Christian Science, verdade sôbre a relação do homem com Deus efetuou uma cura completa dentro de pouco tempo.
Diante de qualquer problema, as palavras de Daví: “Não desfaleça o corção de ninguém por causa dêle”, será de grande auxilio. Vem-nos então a calma e a capacidade para vencer as falsas sugestões do dia, e encontramos na Bíblia, de acôrdo com as interpretações nas páginas divinamente inspiradas do Science and Health, meios de nos livrar-nos de todos os temores. O Apóstolo Paulo desafiou vários perigos em suas longas viagens e inúmeras provações em Jerusalem com as palavras (Atos 20:24): “Mas de nenhuma coisa faço caso.”
Através das obras de Mrs. Eddy, o pó dos sáculos foi removido das santas páginas da Biblia. Ela nos mostrou o valor das Escrituras como o padrão do pensar correto, da ação correta, e do sucesso. Seu pensamento iluminado tirou a Bíblia da escuridão e do dogma. Ela devolveu a Bíblia aos homens como um livro aberto, livre dos selos da ignorância. A Bíblia é recomendada a todos, aos que estão preparados e desejosos de aceitar as suas verdades, àquêles ainda hesitantes, a crêdulos e incrêdulos, pois que “contem a receita para tôdas as curas”.
