Desearía mencionar aquí algunas de las muchas bendiciones que mi familia y yo hemos recibido desde que la Christian Science vino hace diez y nueve años a iluminar como una brillante luz nuestras vidas. A la sazón mi esposa estaba sufriendo de una grave afección intestinal. Un médico nos había dicho que sólo podría vivir unos pocos meses.
Una afectuosa practicista visitó a mi esposa, y nuestra confianza y fe volvieron nuevamente a renacer. La practicista trabajó fiel y devotamente y muy pronto se notó una gran mejoría. A pesar de que a mi esposa no le había sido posible retener alimentos sólidos durante muchos meses, ahora comía todo lo que se le servía sin sufrir desarreglos. También dormía normalmente y al poco tiempo después se sintió enteramente bien.
La Christian Science se convirtió entonces en una maravillosa bendición en nuestra vida familiar. Nuestro júbilo y gratitud eran en verdad grandes, y nos guiaban a descubrir más de este nuevo camino de vida. Asistíamos a los servicios de la iglesia regularmente, los que siempre nos hacían una gran impresión. Nuestra comprensión de la Verdad aumentaba firmemente, y las enfermedades que atacaban a nuestros niños eran prontamente curadas con la ayuda de una practicista. Varios malos hábitos desaparecieron casi sin hacer esfuerzos de mi parte. La desocupación, la falta de vivienda, las dificultades financieras y muchos otros problemas fueron solucionados mediante la inspiración del Amor divino.
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