El hecho de que un diseño o un producto sea nuevo parece ser, a veces, su única virtud. Las muchas ventas que se hacen sobre esta base sugieren el gran anhelo de la gente por la novedad.
El ser espiritual es siempre nuevo. La verdad acerca del ser espiritual es siempre nueva. Es así porque es infinita. Percibir esto, es vivificante, no tiene igual. El ser verdadero no es como una rueda o un péndulo, que vuelve al mismo lugar un sinnúmero de veces. La Verdad jamás se expresa a sí misma de la misma manera. La caracteriza una variedad sin fin. Pese a que las frases en las que se expresa la verdad espiritual pueden parecer muy familiares, las ideas espirituales individuales originadas en la Mente divina, jamás nos vienen dos veces en idéntica manera.
Para quien reconoce esto, un día no es la monótona repetición del anterior. Ni encara problemas crónicos ni se ve ante una aridez de inspiración al buscar su solución. Sino que se está deleitando en ser un pensador espiritual que es innovador y sanador.
Iniciar sesión para ver esta página
Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!