Skip to main content Skip to search Skip to header Skip to footer

Pensamientos nocturnos

Del número de enero de 1986 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana


Durante incontables años, la gente ha tenido la tendencia a temer la oscuridad o las horas de la noche.

Estos temores se están reemplazando lentamente por un punto de vista más progresista y racional de las cosas; hemos empezado a entender que las horas de la noche no tienen que ser necesariamente malas. Sin embargo, a pesar de este progreso, todavía tienden a permanecer, de una forma u otra, las supersticiones acerca de la noche.

La Biblia nos dice que el mandato de la creación fue: “Sea la luz”. Gén. 1:3. Dios nunca creó el mal, tampoco creó la ilusión o sugestión del mal. Dios sólo conoce la luz, la luz de la Verdad y el Amor. Esta es la luz de todas las cosas reales y buenas. Los escritores bíblicos vieron este gran hecho y sacaron lecciones espirituales del mismo. El autor del Salmo 139 lo expresó en estas palabras: “Si dijere: Ciertamente las tinieblas me encubrirán; aun la noche resplandecerá alrededor de mí. Aun las tinieblas no encubren de ti, y la noche resplandece como el día; lo mismo te son las tinieblas que la luz”. Salmo 139:11, 12.

Iniciar sesión para ver esta página

Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!

Para explorar más contenido similar a este, lo invitamos a registrarse para recibir notificaciones semanales del Heraldo. Recibirá artículos, grabaciones de audio y anuncios directamente por WhatsApp o correo electrónico. 

Registrarse

Más en este número / enero de 1986

La misión del Heraldo

 “... para proclamar la actividad y disponibilidad universales de la Verdad...”

                                                                                                          Mary Baker Eddy

Saber más acerca del Heraldo y su misión.