He tenido muchas curaciones maravillosas en mi vida desde que comencé a estudiar Ciencia CristianaChristian Science (crischan sáiens). Particularmente deseo compartir una que ha sido muy especial para mí.
Hace algunos años, comencé a tener, ocasionalmente, períodos en que me sentía imposibilitada para leer o hablar durante algunos minutos, aunque permanecía consciente. Si bien estos momentos eran muy cortos, cada vez fueron más frecuentes. De vez en cuando pedía ayuda por medio de la oración a un practicista de la Ciencia Cristiana; esto siempre me daba un sentido de libertad, el cual agradecí mucho. Pero el problema se repetía. Aunque no tenía temor me di cuenta de que era necesario que la curación fuera total. Después de dos o tres meses de no tener ninguna dificultad estaba muy animada. Me sentía segura para manejar y para llevar a cabo mis actividades de costumbre.
Mas un día cuando sacaba el auto del garaje, empecé a sentir los síntomas habituales. Sin embargo, esta vez perdí por completo el conocimiento y desperté en una ambulancia camino al hospital. Un vecino me había encontrado inconsciente en mi automóvil y había llamado al servicio de emergencia. Estaba agradecida por el interés de mi vecino, y por la tranquilidad de saber que mi auto sólo se había desviado a un costado de la ruta y se había parado; nadie se había hecho daño.
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