Alrededor De Tres mil quinientas personas, entre miembros, invitados y miembros de la prensa — la asistencia más grande para una Asamblea Anual que haya habido en los últimos años — llenaron virtualmente todos los asientos de la Extensión de La Iglesia Madre el 8 de junio. Hubo un sentimiento notable de familia en esta reunión, en la cual se trataron con franqueza los asuntos delicados, se presentó en detalle la situación financiera de la Iglesia, y se expresó gratitud por las evidencias de progreso y logro durante el año que pasó.
Como en la mayoría de las familias que atraviesan por momentos difíciles, hubo algunos que expresaron sus serias preocupaciones. Pero hubo un reconfortante consenso entre los muchos presentes de que los asuntos difíciles que enfrenta la Iglesia sólo se pueden resolver si los miembros se unen en oración, y como expresión de gratitud por nuestra Guía, Mary Baker Eddy, y su libro revolucionario, Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras.
Como verán, los informes indicaron que hay muchas cosas por las que debemos estar agradecidos este año que pasó: un aumento sustancial en las ventas de Ciencia y Salud; un repunte en las admisiones de miembros y en el número de practicistas de la Ciencia Cristiana que aparecen listados; la formación de cinco nuevas iglesias en el este de Alemania; y un aumento en las contribuciones financieras a La Iglesia Madre.
Los invitamos a que lean estos informes condensados en las páginas que siguen (o escuchen la cinta con la grabación completa de la asamblea que se envió a todas las iglesias filiales). Y, a medida que leen o escuchan, esperamos que se unan a este especial espíritu de familia.
La asamblea comenzó con el himno N.° 32 del Himnario de la Ciencia Cristiana. La Presidenta saliente, Jill Gooding, entonces leyó de la Biblia y de los escritos de la Sra. Eddy. La congregación se unió en oración silenciosa, seguida de la repetición del Padre Nuestro. La Sra. Gooding anunció los siguientes dignatarios de La Iglesia Madre: Reverenda Mary Baker Eddy, Pastora Emérita; La Junta Directiva de la Ciencia Cristiana,
; Presidente, ; Primer Lector, ; Segunda Lectora, ; Secretaria, Olga M. Chaffee; Tesorero, John Lewis Selover.COMENTARIOS DEL PRESIDENTE ENTRANTE: NATHAN A. TALBOT
Es muy importante que nosotros hoy pensemos acerca de nosotros mismos como lo que realmente somos, una familia de iglesia. Una familia cuyos miembros se preocupan los unos por los otros, y se esfuerzan por apoyarse mutuamente. Y es necesario que pensemos que somos una familia cuyos miembros se tienen el suficiente respeto como para hablar con honestidad acerca de los asuntos que los preocupan.
Pero primero hablemos acerca de los asuntos que nos unen. Dios, Cristo Jesús, la Biblia, la revelación, Mary Baker Eddy, la curación espiritual, el Consolador, el Manuel de La Iglesia Madre; esas cosas que nos mantienen juntos, tengo confianza de que promoverán y profundizarán el suficiente amor y el suficiente respeto que tenemos los unos por los otros, de modo que avancemos con firmeza a través y más allá de todo aquello que nos quiera dividir.
También es importante que preservemos y hasta profundicemos nuestro respeto por la forma de gobierno que la Sra. Eddy estableció para La Iglesia Madre. De este modo resistiremos aquellas presiones que quisieran llevar a nuestra Iglesia a una base política. Al mismo tiempo, reconocemos con certeza que hay momentos en que una familia necesita hablar.
Hoy nos gustaría hablar acerca de la situación financiera de la Iglesia. Queremos pensar acerca del respeto que le deben a los miembros todos aquellos que ocupan puestos en La Iglesia Madre, así como el respeto que cada miembro le debe a aquellos que sirven y ocupan esos puestos. Vamos a compartir con ustedes algunas de las ideas acerca de la controversia creada por la publicación del libro de Bliss Knapp, y acerca del futuro del periodismo del Monitor y qué forma tomará. Y consideraremos a dónde iremos como Iglesia a partir de ahora. Es un momento de renovación genuina, una época de nuevas oportunidades.
Se ha hablado mucho acerca de la dirección de nuestro movimiento, nuestra Iglesia. Pienso que vamos a perder la idea general si tratamos de medir esta dirección, si prestamos atención simplemente a lo que está ocurriendo en Boston. Nuestra Iglesia, nuestro movimiento, se define mucho más ampliamente. Está definida por las cosas que cada Científico Cristiano hace todos los días alrededor del mundo.
De modo que ¿qué dirección ha estado tomando nuestra Iglesia? Gran parte de esa respuesta tendrá que venir al final de un día dado en que ustedes se pregunten: “¿Qué dirección ha tomado mi vida hoy?” Y luego tenemos que tener en cuenta el hecho de que Cristo, la Verdad, está activo en la consciencia y, finalmente, el Cristo se manifestará a su manera en nuestra vida.
INFORME DEL TESORERO: JOHN LEWIS SELOVER
En diciembre de 1984, todos los miembros de La Iglesia Madre se reunieron a través de una conexión televisada a todo el mundo, para considerar y orar juntos con el fin de encontrar maneras de servir a las demandas espirituales de la humanidad. Esta oración en unidad fue la base para ampliar las actividades de La Iglesia Madre que se iniciaron desde entonces.
Los recursos de La Iglesia Madre se han empleado para hacer este trabajo durante los últimos siete años y medio, y se están haciendo muchas preguntas acerca de los gastos y de las actividades.
Comenzaré con la transmisión por radio. Por la época de la reunión internacional especial por video, en diciembre de 1984, importantes pasos comenzaban a alcanzar a nuestro prójimo a través de las transmisiones de radio, en los Estados Unidos a través de Monitor Radio, e internacionalmente, a través de la red de transmisiones de radio por onda corta mundial. En un período de cinco años, invertimos US$37.5 millones en la construcción y compra de tres estaciones de transmisiones de radio de onda corta. Los costos adicionales de capital para el Monitor Radio fueron de US$2.5 millones. Desde que comenzaron las transmisiones por onda corta y las transmisiones locales, nuestros costos operativos, incluso la programación han sido de US$79 millones. El total de los costos de capital y operativos fueron de US$105 millones netos después de la desvalorización.
Nuestro diario, The Christian Science Monitor. A partir de 1983, se hizo un gran esfuerzo por aumentar la circulación del diario. Se hizo muy evidente que esta inversión (US$23 millones para aumentar la circulación en 28,000 suscriptores) fue excesiva y no se podía continuar. Una circulación de cerca de 110,000 es un número que se puede mantener actualmente.
Desde 1984 hasta fines del año fiscal de 1989, el déficit total por el diario fue de un promedio de US$20 millones al año. Luego del rediseño que se hizo en 1989, el déficit operativo para el diario se ha reducido a aproximadamente US$12 a 13 millones al año. Para resumir, desde 1984 el déficit operativo del diario, incluso los costos del cambio y los costos de capital de 1989, fueron de US$138 millones.
Para la televisión. Nuestro programa diario llamado World Monitor: una presentación por televisión de The Christian Science Monitor, inició su transmisión en septiembre de 1988 y continuó en The Discovery Channel hasta enero de 1992. El total de la renta que The Discovery Channel pagó a La Sociedad Editora de la Ciencia Cristiana durante esos años fue de US$8.3 millones. Durante ese período el costo anual de producción del programa World Monitor fue aproximadamente de US$25 millones.
Como la televisión demostró que era una manera de llevar el periodismo del Monitor a un público más grande, se comenzó a desarrollar un plan para tener nuestro propia red de distribución de programación, un canal de cable de 24 horas, The Monitor Channel, con programación que presentara las noticias y temas especiales de nuestro diario.
The Monitor Channel inició su transmisión el 1.° de mayo de 1991. Muchos operadores de cable y televidentes recibieron con entusiasmo nuestra programación. A los doce meses de su lanzamiento, aproximadamente cinco millones de suscriptores estaban recibiendo el canal. Los costos de programación aumentaron sustancialmente durante 1991 para brindar programas las 24 horas. Desde su inicio en 1990 hasta el fin del año fiscal que acaba de terminar, las inversiones operativas y de capital en The Monitor Channel fueron de US$89 millones.
Para totalizar los gastos por el programa mensual anterior y el semanal de televisión, el programa diario de televisión en The Discovery Channel, el World Monitor, el Canal 68 Boston, y The Monitor Channel, la inversión total que hizo la Iglesia para las operaciones y el capital fue de US$259 millones. Estas cifras son netas de todos los ingresos de televisión que vinieron, principalmente, de The Discovery Channel.
Me gustaría hacerles algunos comentarios acerca de las metas, esperanzas y visión para tener The Monitor Channel. Las cifras y las cuentas no constituyen toda la historia, y aquellos que trabajaron con tanta diligencia, con tanta creatividad y eficacia merecen nuestro aprecio. El lanzamiento de nuestro canal fue notable dentro de la industria. Se nos observaba con cuidado, y el aumento en el número de suscriptores, los premios que le otorgó la industria, y la imitación que hubo, demostró que estábamos haciendo una contribución valiosa al mundo de la televisión. Pero cuando no se concretaron los arreglos con los potenciales inversionistas y al ir en aumento los gastos, nos vimos ante la necesidad de dar los pasos para discontinuar The Monitor Channel.
En esta era, en que tanto del mundo y su desarrollo se nos presenta visualmente, sigue existiendo la necesidad de una voz espiritual, moral e independiente en el desierto. A lo largo de estos años, hemos adquirido valiosa experiencia a un precio; pero se ha demostrado que podemos transmitir una programación buena, que nutre, es considerada y está basada en el ejemplo que nuestra Guía dio al entrar con tanto valor dentro del periodismo. Un período en el que se haga una evaluación nueva, vigorosa, generosa y llena de oración, puede iluminar los pasos necesarios que se deben dar para que esta Iglesia brinde total servicio a la humanidad.
Revista World Monitor: The Christian Science Monitor Monthly. Continuaremos su publicación con un plan revisado de menor costo. La estrategia original hablaba de una inversión de US$9.5 millones antes de llegar a un equilibrio en los gastos. Durante este año fiscal hemos invertido US$36.5 millones. La revista sigue llegando a un público importante, muy diferente del que lee el diario. Y hemos trabajado con importantes anunciantes que antes no habían comprado espacio para anunciarse en nuestras publicaciones hasta que estuvo disponible la revista.
Desde el año fiscal 1984/85 The Christian Science Journal, el Christian Science Sentinel y el Cuaderno Trimestral de la Ciencia Cristiana han dado una ganancia de US$2.5 millones. Durante ese mismo período los Heraldos han tenido un déficit de casi US$10 millones.
Los costos administrativos para la operación de la Oficina de la Secretaria, la Oficina del Tesorero, el Comité de Publicación, el Cuerpo de Conferenciantes, la Junta de Educación, el Agente del Editor y la Oficina de la Junta Directiva han sido de un promedio de cerca de US$34 millones al año.
El pago de la Capitación anual llega a La Iglesia Madre de una manera ordenada y regular. Otras contribuciones de gratitud, a las que nos referimos con afecto como “dinero de amor”, son de alrededor de un millón más que el año pasado. ¡Muchas gracias! Las otras entradas como las que provienen de inversiones, legados y la venta de bienes, derivan, principalmente, de las contribuciones que se hacen como expresión de gratitud. Durante el período de 1984 hasta el año fiscal que acaba de terminar, la entrada total de La Iglesia Madre fue de US$683 millones.
Los gastos totales del año fiscal que acaba de terminar (1991–1992) incluyen los gastos operativos, los gastos de capital, el capital acumulado por discontinuar operaciones y los saneamientos de capital. Los gastos totales de capital y operativos para las actividades que continúan, es decir, excluyendo la televisión, fueron de US$94 millones. Los diez meses de gastos operativos de la televisión, antes de tomar la decisión, fueron de US$53 millones. También, para la televisión fue necesario acumular US$68.5 millones adicionales para indemnizar al personal, cerrar las oficinas, los contratos, y disponer de los bienes de capital. Por lo tanto, los gastos totales de capital y operativos con las acumulaciones, es de US$215.5 millones.
La Iglesia no tiene deudas, excepto la de las rentas de capital, de lo cual se informó el año pasado. Las obligaciones de renta al 30 de abril fueron de US$4.7 millones, que esperamos eliminar a medida que nos deshagamos del equipo de televisión.
Los fondos que se tienen a mano en los fondos restrictos, entre ellos el Fondo de Dotación de The Christian Science Monitor, y el Fondo de Dotación de La Iglesia Madre, ascienden a un total de US$104 millones. En los fondos irrestrictos: El saldo de este fondo ha disminuido notablemente este último año. El principal factor en esta disminución han sido los gastos netos de operación que, incluyendo los costos de capital y de operación discontinuada, fueron de US$154 millones. Al deducir los gastos de US$17 millones por la compra de equipo en años anteriores, se tuvo como resultado un cambio neto del saldo del fondo de US$137 millones. El saldo de los fondos irrestrictos que había al 1.° de mayo de 1991 era de US$22 millones, y ahora el saldo del fondo irrestricto al 30 de abril de 1992, es de US$115 millones en rojo. De esta cantidad US$68.5 millones es dinero que se ha separado con el propósito de pagar los gastos de las actividades que se discontinuaron, de los cuales ya se han gastado US$10 millones.
Tenemos dinero en efectivo para cumplir con todas nuestras obligaciones. Los gastos de cierre se están cubriendo mediante la transferencia de hasta US$45 millones de la reserva del fondo de pensiones como sea necesario. El valor neto de La Iglesia Madre, incluso los fondos restrictos, los fondos irrestrictos, la reserva del fondo de pensiones, la planta y el equipo al 30 de abril de 1992, es de US$138 millones.
El Manual especifica que los libros de la Iglesia deben tener una auditoría anual. Los Estatutos establecen que el Comité de Finanzas se tiene que encargar de que se haga.
Hans Meyer: Mi firma, Ernst & Young, ha sido contratada por el Comité de Finanzas para hacer la auditoría de los estados de cuenta financieros de La Primera Iglesia de Cristo, Científico, para el año que terminó el 30 de abril de 1992. Nuestra auditoría de los estados de cuenta financieros combinados, está sustancialmente completa. Basada en la revisión que hemos hecho hasta la fecha, es probable que nuestra opinión sobre la auditoría no sea calificada.
Respecto a los préstamos del Fondo de Pensiones, hemos revisado la opinión legal externa que confirmó nuestro entender de que el Fondo de Pensiones es parte de los Fondos Irrestrictos y que los fondos que la Junta Directiva apartó previamente para las pensiones, pueden ser redesignados por la Junta para uso general.
En resumen, puedo informarles que nuestra auditoría hasta la fecha, no ha resultado en ningún ajuste de auditoría, que hemos recibido la total cooperación de la administración y de su personal durante nuestra auditoría, y que tenemos el total acceso a toda la información solicitada.
John Selover: Para que no haya dudas, quiero aclarar que una opinión “no calificada” es la que nosotros, o cualquier otra organización sometida a una auditoría, quiere recibir.
Muchas gracias por la atención especial que han prestado este año. Apreciamos mucho la generosidad que han expresado mediante su paciencia y atención. Es muy inusual, casi sin precedentes, que se presente un informe tan exhaustivo como éste. Digo casi sin precedentes, por la excepción a esto que hizo la Sra. Eddy en 1907. En esa época, se discutió públicamente y hubo controversia acerca de su supuesta falta de habilidad para cuidar de sus propios asuntos. De modo que para responder a las muchas falsas acusaciones en su contra, ella presentó un afidávit que se publicó después en el Sentinel de ese año. Este incluyó una lista detallada de sus propios bienes y condición financiera y ayudó a resolver y a responder a esas acusaciones. Una vez más su ejemplo de elevarse para cumplir con circunstancias especiales, nos sirve de ejemplo. No podemos hacer menos; por ese motivo este año les hemos dado este informe completo y serio. (En la Asamblea Anual se distribuyó un informe financiero que los miembros de La Iglesia Madre pueden solicitar al Tesorero.)
INFORME DEL GERENTE DE LA SOCIEDAD EDITORA DE LA CIENCIA CRISTIANA: AL M. CARNESCIALI
Permítanme contarles acerca de las áreas especiales que hay dentro de nuestras actividades, que estoy seguro van a encontrar de gran interés. The Christian Science Monitor, nuestro diario, conserva el mismo número de personal en Boston y en los distintos despachos alrededor del mundo. Pero, yendo más lejos, planeamos comprar e instalar para el Monitor, un nuevo equipo que nos dará la habilidad de transmitir electrónicamente páginas mecanografiadas listas para imprimir en un taller de imprenta remoto. El resultado: una reducción en los costos y una mejora de treinta a cuarenta y cinco minutos en nuestro plazo para tener listo el diario. Este es un paso en una serie de acciones que se han puesto en práctica los tres últimos años para mejorar nuestros plazos por más de tres horas y aumentar nuestra habilidad para ofrecer noticias actualizadas.
Se han dispuesto fondos para mejorar nuestra calidad de redacción, tanto en los programas de onda corta como en los nacionales. Al mismo tiempo estamos mejorando los programas de Monitor Radio que se transmitían en la Radio Pública Americana (APR). Los programas de noticias de Monitor Radio son una fuente importante de noticias para la Radio Pública en más de doscientas estaciones afiliadas. El personal del Servicio Mundial de The Christian Science Monitor de onda corta va a aumentar. También vamos a hacer ajustes a nuestras antenas que nos permitirán alcanzar a un público mayor a mejoras horas.
Todas las publicaciones periódicas religiosas que se envían al campo internacional tendrán el beneficio de mejores y más rápidas entregas. Esto incluye The Christian Science Journal, el Christian Science Sentinel, El Heraldo de la Ciencia Cristiana, y el Cuaderno Trimestral de la Ciencia Cristiana. La revista World Monitor va a preservar su calidad, tamaño y frecuencia de distribución.
Se han tomado medidas para mantener la capacidad de producción de la televisión, dando autorización para la producción de La Lección Bíblica Diaria, los proyectos del Cuerpo de Conferenciantes, y brindar apoyo a los esfuerzos de venta de los programas en existencia.
Se han hecho tantas declaraciones acerca del libro, The Destiny of The Mother Church por Bliss Knapp, que ofrecemos esta declaración con el deseo sincero de que ayude a aclarar este tema. La única declaración correcta acerca de la teología de la Ciencia Cristiana solo se encuentra en los escritos de nuestra Guía, Mary Baker Eddy. Teniendo esto como fundamento sólido, confiamos en que nos ayude a distinguir la diferencia que hay entre “literatura autorizada”, un término que no aparece en el Manual de La Iglesia Madre, y “literatura de la Ciencia Cristiana”, un término que aparece en el Manual.
En su contexto más amplio, “literatura autorizada” se refiere a toda la literatura que publica o vende La Sociedad Editora de la Ciencia Cristiana. Esto incluye los escritos de Mary Baker Eddy. También incluye otra literatura, como obras de historia o comentarios sobre la Biblia publicados por otras casas editoriales.
“Literatura sobre la Ciencia Cristiana”, como se refiere el Articulo VIII, Sección 11, trata solamente sobre literatura con la que se tiene la intención de exponer las reglas y la demostración de la Ciencia Cristiana. No incluye libros de consulta como son las biografías, diccionarios y comentarios.
Como ha sido siempre el caso, mucho de lo que la Sociedad Editora publica o vende como “literatura autorizada” no aparece bajo el título de “literatura de la Ciencia Cristiana”. Destiny, las obras históricas o las reminiscencias no pueden llevar el peso o la responsabilidad de ser “literatura de la Ciencia Cristiana” correcta o incorrecta, como no se puede calificar así a los comentarios sobre la Biblia publicados por otras editoriales, reproducciones de series del Monitor, o compilaciones de artículos del Monitor, que la Sociedad Editora publica o vende. De otra forma, mucha de la literatura que se vende en las Salas de Lectura desaparecería.
Hoy, más que nunca antes, como ciudadanos del mundo, debemos preguntarnos: “¿Cuán interesados estamos en lo que necesita sanarse en el mundo? ¿Cuán interesados estamos en compartir la gran bendición del Cristo sanador con toda la humanidad?”
Muchas iglesias están contestando estas preguntas al utilizar los recursos que están disponibles a través de la Sociedad Editora. Además de lo estipulado para las Salas de Lectura, tenemos un programa en la actividad editora que permite a las iglesias filiales usar en sus comunidades locales los materiales provistos por La Iglesia Madre para las transmisiones de radio y televisión. Esto incluye las Lecciones Bíblicas grabadas y las transmisiones del Heraldo. Las iglesias están empezando a informar acerca de los importantes frutos que están teniendo como resultado de estas nuevas formas de llegar al mundo.
¿Cuál es el profundo significado que tienen nuestros esfuerzos de hoy por expandir lo que la Sra. Eddy estableció a través del Monitor y a través de las publicaciones periódicas? Tenemos el mandato de “que se mantengan las publicaciones periódicas a la altura de la época”. Y por encima de esto, hemos sido testigos de un cambio radical en los métodos de comunicación. Cuando se le preguntó a la Sra. Eddy acerca de la búsqueda de invenciones materiales modernas, ella contestó: “Oh, no podemos oponernos a ellas. Todas contribuyen a una forma de vida más nueva, refinada y etérea. Ellas conducen a las esencias más finas. Alumbran el camino a la Iglesia de Cristo. Las usamos, las hacemos parte de nuestro vocabulario, ellas preparan el camino para nosotros” ( The First Church of Christ, Scientist, and Miscellany).
¿Compartirán ustedes conmigo — a través de sus oraciones y pensamientos — en los próximos días y semanas, la pregunta que nosotros en la Sociedad Editora debemos hacernos? A medida que avanzamos hacia una época de cambios acelerados, ¿cómo podemos situarnos de forma más adecuada para llevar a cabo la demanda de nuestra Guía de mantener nuestras publicaciones periódicas “a la altura de la época” y enérgica y juiciosamente “administrar los negocios de La Sociedad Editora de la Ciencia Cristiana sobre una base estrictamente cristiana”?
INFORME DEL GERENTE DE LOS COMITES DE PUBLICACION: M. VICTOR WESTBERG
En los primeros años de nuestro movimiento, no era inusual que los miembros se sintieran incómodos por estar en la mira debido a sus esfuerzos por defender la verdad. Bueno, prepárense: una vez más el estar incómodos se ha vuelto la norma, pero es una incomodidad vivificante que lleva a la curación. A veces necesitamos que nos den un suave codazo para compartir la Ciencia Cristiana. Para compartir nuestro amor, un amor que ama profundamente a la humanidad.
Este año que pasó, cuando Nate Talbot era el Gerente del Comité, él visitó los diarios de cuarenta y un estados y de varias provincias de Canadá. Pudo corregir muchas imposiciones durante ese viaje. Algunos redactores lo recibieron con calidez. Otros fueron más cautelosos, por lo general, debido a la publicidad negativa acerca de la Iglesia de la Ciencia Cristiana en la prensa. Francamente, si no se hace referencia a los casos de la corte, la televisión, o a lo que algunos consideran un libro que produce controversia, tendemos a “no ser una historia importante”. No ha habido mucho interés en nuestra verdadera historia: es decir, el lograr mediante la curación espiritual, la renovación de las propiedades físicas y la regeneración de vidas perdidas.
Este año que se inicia continuaremos reuniéndonos con periodistas y redactores. Al llevar el mensaje genuino de la Ciencia Cristiana a la comunidad, llegaremos a aquellos que buscan honestamente la Verdad y a aquellos que buscan esperanza y curación.
Seguiremos yendo a las legislaturas y a los tribunales cuando sea necesario. Participaremos de las conferencias que se hagan sobre el maltrato a los niños; daremos charlas a los estudiantes de derecho; tendremos entrevistas con redactores y funcionarios de salud, y ofreceremos una guía, cuando sea apropiado, a aquellos que hacen películas y preparan espectáculos en televisión sobre la Ciencia Cristiana. Continuaremos presionando para tener una legislación que respete el derecho a elegir la curación espiritual, tanto para adultos como para niños, y nos opondremos a aquellas leyes que restringirían nuestra libertad religiosa, donde quiera que se encuentren.
INFORME DE LA SECRETARIA DE LA IGLESIA MADRE: OLGA M. CHAFFEE
A pesar de que el número de miembros ha disminuido en los últimos años, el número de solicitudes de nuevos miembros continúa aumentando. De hecho, los nuevos miembros este año proceden de cincuenta y seis países, la mayor parte de ellos vienen de los Estados Unidos, seguidos por Africa, Europa y América del Sur. Hay muchos estudiantes de la Escuela Dominical entre los nuevos miembros.
Nos inspira la riqueza espiritual que los nuevos miembros traen a esta Iglesia, a medida que nos familiarizamos con ellos a través de sus cartas y las de aquellos que los refrendan. He aquí algunos ejemplos de las curaciones que han compartido con nosotros: reumatismo de las rodillas, depresión, malaria, alcoholismo, el pie deformado de un niño, provisión, piedras en los riñones, problema en la espalda causado por un accidente, artritis, desempleo, neumonía, conflictos familiares, problemas morales y cáncer de pecho. Es bueno añadir que algunos de estos casos fueron diagnosticados por los médicos antes de que recibieran tratamiento en la Ciencia Cristiana, y que subsecuentes exámenes confirmaron estas curaciones.
Se me ha preguntado si es cierto que algunas filiales están cerrando sus puertas. Debo decir que sí, pero es muy importante tener presente que esa es solamente parte de la historia. En algunos casos, la decisión de una sola persona de dedicarse a la práctica pública ha impulsado a su iglesia filial a tener gran renovación y actividad.
Algunas filiales están trabajando bajo la falsa suposición de que están fracasando, cuando en realidad no es cuestión de fracasar sino de identificar correctamente la oportunidad de servir. Tal vez la comunidad donde se encuentra la iglesia filial ha cambiado drásticamente. En algunos casos las filiales encuentran que al unirse a otra filial cercana, pueden satisfacer las necesidades actuales de su comunidad con renovada fortaleza y eficacia. No obstante, se debe tener bien claro que no hay una sola respuesta, sino que la necesidad varía de lugar a lugar.
Además de las 2.600 congregaciones que hay alrededor del mundo, existen 270 grupos que celebran servicios religiosos. Algunos son nuevos, y la mayor parte de este crecimiento se debe al impulso de las actividades de publicación y de radiodifusión de La Iglesia Madre. Nosotros les damos la amorosa bienvenida a las congregaciones de la Ciencia Cristiana que se han formado alrededor del mundo el año pasado, y sentimos una gratitud especial por las nuevas iglesias en las ciudades de Chemnitz, Rostock, Leipzig, Berlin-Mitte y Magdeburg. Debido al número creciente de grupos y nuevas iglesias y la necesidad cada vez más grande de tener una rápida comunicación, ahora tenemos representantes de la Secretaria en Australia, Alemania, Kenia, Nigeria, India e Indonesia.
Muchos miembros naturalmente desean entrar en la práctica pública y con el tiempo anunciarse en The Christian Science Journal. El año pasado hubo un aumento del 67% de personas aceptadas para anunciarse en el Journal. Encontramos que este aumento es causa de regocijo.
Hemos orado y estudiado continuamente el Estatuto del Manual, Artículo VIII, Sección 31, sobre los enfermeros de la Ciencia Cristiana, y esto ha producido renovada inspiración y nuevas posibilidades a los miembros de todo el mundo, para responder a la necesidad de enfermeros de la Ciencia Cristiana.
Aquí en La Iglesia Madre, por algún tiempo hemos estado buscando formas más eficaces de responder a las necesidades de los niños y jóvenes de hoy. Con la colaboración del Movimiento, hemos encontrado la respuesta en las Reuniones de Jóvenes. Cuando los Científicos Cristianos en un área específica, en cualquier parte del mundo, determinan que es necesario tener una de estas reuniones, ellos la planean mediante la oración, la apoyan y la financian. En el transcurso del próximo año, se están haciendo planes para tener reuniones alrededor del mundo y en los Estados Unidos. Estas reuniones están abiertas a jóvenes de todas las religiones entre las edades de doce a treinta años.
Ahora bien, quisiera hacer algunos comentarios acerca de la correspondencia. En términos generales, la correspondencia muestra que los miembros son muy solícitos y considerados. Aun las cartas que expresan inquietudes o desaprobación se han escrito con consideración. A veces, la Secretaria recibe alguna queja bajo el Artículo I, Sección 9, del Manual de La Iglesia Madre titulado “Deberes de los dignatarios de la Iglesia”. La estudiamos con cuidado, y seguimos fielmente los pasos establecidos en ese Estatuto.
¿Cuál es nuestra función en este mundo? En el Manual (Artículo VIII, Sección 16) encontramos un mandato muy claro: “Será deber de los miembros de La Iglesia Madre y de sus filiales promover paz en la tierra y buena voluntad para con los hombres; pero los miembros de La Iglesia Madre no deberán en lo sucesivo afiliarse a otras sociedades excepto aquellas especificadas en el Manual de La Iglesia Madre, y deberán esforzarse por promover el bienestar de toda la humanidad demostrando las reglas del Amor divino”.
Esforcémonos todos, individual y colectivamente, por vivir este mandato, y tengo confianza de que cuando nos reunamos el próximo año, nuestros informes serán una muestra de este compromiso.
INFORMES DEL MOVIMIENTO: MARION SHELDON PIERPONT
Es con gran alegría que compartimos con ustedes parte del trabajo que nuestro comité institucional está llevando a cabo en las prisiones en Montevideo, Uruguay.
Uno de los reclusos que asiste a los servicios sanó de los efectos de la tristeza que sufrió después de que su pequeña hija falleció. El deseo de suicidarse se transformó en un deseo de vivir y aprender más acerca de Dios mediante la Ciencia Cristiana. Otro prisionero empezó a venir sólo porque quería hacer algo diferente. El se ha convertido en uno de los estudiantes más consagrados y ayuda a sus compañeros en la prisión. Dice que una vez que esté “fuera”, desea continuar ayudando a los prisioneros uniéndose al trabajo del comité institucional. El ve que la Ciencia Cristiana es necesaria en las prisiones. Otro recluso nos contó cómo sanó a su compañero de celda de la adicción a las drogas, de la misma forma natural que los primeros cristianos sanaban.
Y de un miembro del Grupo de Científicos Cristianos en el distrito de Merimbula y Bega, Nueva Galés del Sur, Australia:
No es poco usual que haya más alumnos en la Escuela Dominical que asistentes a la iglesia. Este era el caso cuando las reuniones se celebraban en nuestra granja. A la hora indicada, yo miraba desde la casa de la hacienda mientras los chicos saltaban de los corrales del ganado, dejaban sus caballos, salían del gallinero y después se encontraban en el camino que los traía a la Escuela Dominical. Nuestra congregación continúa creciendo. Durante los últimos doce meses todos aquellos que no eran miembros de La Iglesia Madre enviaron su solicitud y fueron aceptados. Uno de los miembros del grupo recibió instrucción en clase Primaria y otro se anuncia como practicista en The Christian Science Journal.
El próximo informe es de Segunda Iglesia de Cristo, Científico, en Hamburgo, Alemania.
El hecho de que estuvimos muy involucrados en la Reunión para Jóvenes en Europa hizo que nuestros miembros estuvieran más conscientes de la comunidad que los rodeaba, y el pensamiento se abrió para incluir a la comunidad y ser más amorosos y solícitos.
Un joven que se interesó en la Ciencia Cristiana a través de nuestra Sala de Lectura en la primavera de 1989, asistió a la Reunión de Jóvenes en Hamburgo y se hizo miembro de nuestra iglesia. Una mujer, que como resultado de su participación en la Reunión de Jóvenes se hizo miembro de nuestra iglesia, también sanó de la necesidad de usar anteojos.
El próximo informe es de un miembro de la Sociedad de la Ciencia Cristiana en Luanda, Angola.
Antes de conocer la Ciencia Cristiana, la Biblia era para mí tan solo un libro de cuentos para niños, pero gracias al libro de texto, Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras por Mary Baker Eddy, pude comprender el mensaje sanador de este libro.
Toda mi familia se benefició con este entendimiento; tuvimos muchas curaciones. Mi esposa sanó de tuberculosis. Mi hija sanó de un defecto de nacimiento en un brazo, y yo salí de la cárcel después de que me detuvo el gobierno de Mobutu. Los miembros de la Sociedad de la Ciencia Cristiana a la que asistía me enviaron un ejemplar de El Heraldo de la Ciencia Cristiana que tenía artículos sobre la importancia de la oración al ayudar a prisioneros políticos. Este Heraldo estaba lleno de muchas verdades espirituales, y estas verdades me liberaron. Me dejaron libre días después de haberlo leído y más de tres meses después de que me hubieran encarcelado.
Y un informe de Rusia.
El domingo 24 de mayo, se celebró el primer servicio religioso de la Ciencia Cristiana en Moscú. También hay un grupo de adultos, estudiantes y niños que hace más de un año que se están reuniendo en San Petersburgo.
INFORME DEL REDACTOR EN JEFE DE LA SOCIEDAD EDITORA DE LA CIENCIA CRISTIANA: RICHARD C. BERGENHEIM
En la historia de la Ciencia Cristiana, es notable que siempre que la Ciencia Cristiana ha llegado verdaderamente al corazón, ha producido el deseo de servir. Nuestro propio desarrollo espiritual nos ha hecho receptivos al mensaje de la Ciencia Cristiana. Y, al haber recibido este don de Dios, usted y yo compartimos un profundo legado. Como establece el Manual de la Iglesia por la Sra. Eddy, tenemos un “deber para con Dios, para con [nuestra] Guía, y para con la humanidad”. Aquellos que escriben están compartiendo lo que han aprendido de su vida diaria y de la práctica de la Ciencia Cristiana. En lealtad a nuestra Guía, ellos están dominando la disciplina que se requiere para escribir con eficacia. Durante los últimos años, a estos escritores se han unido aquellos que están deseosos de colaborar con las transmisiones del Heraldo. Todos estos colaboradores fortalecen a sus compañeros de trabajo en la Causa de la Ciencia Cristiana y de toda la humanidad.
Sin su participación como colaboradores y suscriptores, las publicaciones periódicas no pueden ser fuertes. Como Iglesia se nos llama a que pensemos con mayor detenimiento acerca de las obligaciones y privilegios que tenemos como miembros. ¿Está usted suscrito? ¿Orará en busca de la guía de Dios para compartir con otros estas publicaciones periódicas?
Estamos trabajando para responder de manera más eficaz a las necesidades de nuestros suscriptores al Heraldo. Esperamos nombrar Redactores Colaboradores para los Heraldos en español, alemán, francés y portugués. Trabajando desde su campo de actividad, ellos ayudarán a los Redactores aquí en la Sociedad Editora a proveer material para los Heraldos y nuestras otras publicaciones periódicas. Mientras que estos cuatro Heraldos se continuarán publicando mensualmente, las ediciones trimestrales del Heraldo están pasando por revisiones significativas. Estos se van a publicar una o dos veces al año con un diseño similar al de los Heraldos mensuales, y cada número tendrá el doble del contenido de un número corriente. También esperamos hacer una prueba de una versión del Heraldo en cassette en uno de estos idiomas.
La integridad, la honestidad, la falta de temor, la perspicacia, el entendimiento, la compasión, el amor, la esperanza, la pureza: éstas son las cualidades que han llegado a ser el sello característico del periodismo del Monitor. No hace mucho la Fundación Gannett nombró a The Christian Science Monitor como uno de los veinte mejores diarios en el mundo. El programa Monitor en la televisión ganó un premio nacional Emmy por su reportaje acerca de la antigua Unión Soviética. La guía a los programas radiales, Passport to World Band Radio, incluirá The World Service of The Christian Science Monitor en su lista de los diez mejores programas en su guía para 1993. La revista World Monitor: The Christian Science Monitor Monthly se ha distinguido por su habilidad, como lo expresa la Sra. Eddy, “para prever y predecir los acontecimientos que conciernen al bienestar universal” (Ciencia y Salud).
El diario ha tenido ochenta y cinco años para aprender lo que significa ser The Christian Science Monitor, y continúa aprendiendo. Nuestras actividades de radio y televisión han tenido mucho menos tiempo. Ellas han tenido el beneficio de la experiencia del diario, pero hay que aprender nuevas lecciones. Los aspectos fuertes y débiles de los medios de comunicación son diferentes. Necesitamos dominar estas herramientas del siglo XX si vamos a estar preparados para el trabajo que tenemos por delante en el siglo XXI; de lo contrario, estamos en peligro de convertirnos en un artefacto del siglo XIX.
De todas nuestras publicaciones periódicas, probablemente no haya ninguna que llame a expresar mayor gratitud que las Lecciones Bíblicas. Dado que la Sra. Eddy declara en el Manual de La Iglesia Madre (Artículo III, Sección 1) que es de estas lecciones “que depende grandemente la prosperidad de la Ciencia Cristiana”, podemos asumir que nuestra prosperidad individual en la práctica de la curación cristiana depende grandemente del trabajo que hagamos con estas lecciones. Estas lecciones nos predican individualmente y al mundo entero. Ellas rodean al mundo con la Palabra de Dios y la tierra responde a este Amor.
Tal vez ésta sea la hora en la que nos podríamos apoyar mutuamente y, trabajando juntos como “colaboradores de Dios”, podríamos cumplir con nuestro deber para con Dios, para con nuestra Guía y para con la humanidad.
INFORME DE LA EDITORA DE LOS ESCRITOS DE MARY BAKER EDDY/PRESIDENTA DE LA JUNTA DIRECTIVA DE LA CIENCIA CRISTIANA: VIRGINIA HARRIS
Amigos, antes de que tuviéramos una Iglesia, tuvimos un libro. La Ciencia Cristiana, como ustedes saben, le fue revelada a Mary Baker Eddy. Ella se la dio al mundo en el libro Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras. Todo surgió a partir del descubrimiento espiritual y la verdad que hay en ese libro. La Iglesia existe donde quiera que una persona esté estudiando la Biblia y Ciencia y Salud; esté viviendo y probando las leyes espirituales. Y todos pueden sanar mediante el estudio de Ciencia y Salud.
Pocos libros tienen una historia de publicación comparable a la de Ciencia y Salud. rara vez se ha dado a un libro tanta consideración y oración, o se ha tenido como consecuencia tanta lucha y persistencia como con este libro. Rara vez se ha usado un libro de tantas maneras. Ciencia y Salud se ha estudiado con regularidad como un libro de texto, leído en público con la Biblia como el pastor, y consultado como una fuente para aquellos que buscan vislumbre e inspiración en la Biblia. Desde su primera publicación, se han vendido más de 8.850.000 ejemplares. Desde 1905 las ventas anuales siempre habían sido de más de 50.000 ejemplares. Pero me da mucha alegría informar que este año que pasó hubo un aumento considerable en las ventas: se vendieron 82.351 ejemplares.
Ciencia y Salud se publica en 17 idiomas. Se lee en las iglesias en 70 países, y en muchos otros países donde todavía no hay una iglesia de la Ciencia Cristiana establecida. Ciencia y Salud sigue teniendo un impacto perdurable. Nuestra Guía dice: “El hecho es que el libro de texto de la Ciencia Cristiana está transformando al universo” (Escritos Misceláneos).
Ahora, al concluir, como Presidenta, en nombre de la Junta, quisiéramos tomar un momento para destacar que este año se cumplen cien años desde que Mary Baker Eddy reorganizó su Iglesia en 1892.
La Sra. Eddy une la palabra “eternidad” con el Manual de la Iglesia (véase The First Church of Christ, Scientist, and Miscellany). De modo que, esta Iglesia de cien años marca el aniversario más breve. Aun así, hasta ese corto período de tiempo ha visto que los Estatutos y los Artículos de Fe brindan guía, refugio, aliento, disciplina, curación, convicción, ternura, continuidad, resolución, iluminación... lo que sea necesario, y serán necesarios para guiar nuestra vida como miembros individualmente, y como institución.
Al mirar a los próximos cien años de esta Iglesia nos podemos hacer muchas preguntas. Dos de esas preguntas deberían hacerse con las palabras de nuestra Guía: “¿Estoy viviendo la vida que más se acerca al bien supremo? ¿Estoy demostrando el poder sanador de la Verdad y el Amor?” Y ella promete: “Si es así, entonces el camino se irá iluminando cada vez más, ‘hasta que el día es perfecto’. Vuestros frutos probarán lo que el comprender a Dios le trae al hombre” (Ciencia y Salud).
Al irnos hoy, juntos marcamos el comienzo de un nuevo siglo para esta Iglesia. Que sea bendecida con aquellos que tienen unidad de propósito para elevar a la humanidad y para traer curación a los problemas y a los pecados del mundo. La restauración del cristianismo de Cristo, y su poder original para sanar, vale todo lo que damos para la misión de nuestra Iglesia y a la humanidad. Está demostrado por todo lo que somos, individualmente y como iglesia.
Los miembros cantaron el Himno N.° 176 del Himnario de la Ciencia Cristiana, y se cerró la asamblea.