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¡Dios existe!

Del número de diciembre de 1992 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana


¿Alguna Vez Dudo de la existencia de Dios? Cuando la inseguridad y la falta de confianza acerca de la existencia de Dios tratan de dominarnos, podemos aprovechar la oportunidad para conocer mejor a Dios y sentir Su presencia. No es necesario que nos sintamos desalentados porque no podemos ver a Dios, el Espíritu infinito, con nuestros ojos. Es el sentido espiritual — no los sentidos materiales — el que percibe al Principio infinito e incorpóreo, Dios. Tal vez pensemos que lo que hemos aprendido acerca de Dios no es suficiente para resolver nuestros problemas o satisfacer nuestro deseo de alcanzar una felicidad y salud más estables y una paz más duradera. Pero en la Biblia, Dios nos prometió que El está presente para ayudarnos. Nada está más cerca de una persona que su amoroso creador, y podemos tener pruebas de Su presencia en nuestra vida diaria.

La Biblia es la fuente del verdadero conocimiento acerca de Dios. El estudio de las Escrituras y, particularmente, el Evangelio de Cristo Jesús — sus enseñanzas y curaciones — nos demuestra que el comprender que la naturaleza de Dios es totalmente buena nos devuelve la salud y la armonía. La Ciencia Cristiana, como Mary Baker Eddy llamó a su descubrimiento, es un estudio espiritual y científico de la ley divina del ser. En Ciencia y Salud la Sra. Eddy nos da esta iluminadora explicación de la Deidad: “Dios. El gran Yo soy; el que todo lo sabe, que todo lo ve, que es todo acción, todo sabiduría, todo amor, y que es eterno; Principio; Mente; Alma; Espíritu; Vida; Verdad; Amor; toda sustancia; inteligencia”.

Antes de conocer a Dios como Lo presenta la Biblia y de conocer la Ciencia Cristiana, tuve un difícil conflicto respecto a Dios y Su existencia. Como yo amaba a Dios sobre todas las cosas, no podía imaginar una vida sin Dios, sin esta comunicación cercana que yo había tenido desde mi niñez con nuestro Padre celestial. Pero un error serio en lo que yo creía de Dios — una mentira acerca de Su naturaleza — intentaba interrumpir esta relación armoniosa.

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