“Los Angeles, 4 de marzo (Reuters) — Una familia desamparada ha descubierto que la honestidad puede pagar con dividendos tan grandes que las vidas son a veces renovadas.
“Pauline Nichter y su hijo de once años, Jason, estaban visitando un centro comercial en Buena Park, un suburbio de Los Angeles, el jueves pasado cuando ella encontró una billetera en una tienda de juguetes. La billetera, que había perdido un turista, contenía una tarjeta de crédito, un boleto de avión para Nueva Zelanda, y US$2,394 en efectivo.
” ’Por un momento pensé en quedarme con el dinero,’ dijo la Sra. Nichter más tarde. ’Pero sólo por un momento’.
Trabajos perdidos, apartamento perdido
“En vez de hacer eso, entregó la billetera con todo su contenido a la estación de policía más cercana, donde el turista la reclamó. La noticia de su honestidad pronto se hizo pública, y durante casi una semana ella y su esposo, Tom, han recibido tantas donaciones de dinero en efectivo y ofertas de trabajo y casa, que todavía no han podido examinarlas todas.
” ’Lo que hemos recibido desde el jueves pasado’, dijo la Sra. Nichter, ’es mucho más que lo que estaba en la billetera’.
”El Sr. Nichter, de 44 años de edad, perdió su trabajo en una almacén el año pasado, y la familia se vio obligada a mudarse del apartamento alquilado cuando la Sra. Nichter, de 46 años de edad, luego perdió su trabajo como secretaria. Después de mudarse, la familia Nichter vivió en su única posesión, su auto, que estaban en peligro de perder por no poder pagar las cuotas.
”Ahora todo eso ha cambiado. Les han ofrecido un apartamento gratis hasta que se estabilicen, y un donante anónimo les puso los pagos del auto al día. La pareja ha recibido más de 200 ofertas de trabajo, y la policía todavía está contando el dinero de las donaciones, entre US$1.00 y US$100.00, que llegan a la estación donde la Sra. Nichter entregó la billetera.
”Además, una pareja de ancianos que había leído en un diario sobre la familia Nichter, llegó a la estación de policía y preguntó cuánto dinero había en la billetera. Cuando se enteraron, el señor dijo: ’Entonces, eso es lo que ellos se merecen’, y escribió un cheque por la suma de US$2,400.
”En una conferencia de prensa, la Sra. Nichter, con lágrimas en los ojos, dijo: ’Ni en un millón de años me hubiera imaginado que esto nos pasaría a nosotros’.”
Reimpreso con permiso de Reuters America, Inc.
Nota editorial:
”... eso es lo que ellos se merecen”. No podemos menos que percibir en este relato la evidencia de las recompensas que vienen, en una forma u otra, cuando nos identificamos con las cualidades que tienen su fuente en Dios, y cuando somos testigos de la presencia de Dios en nuestra vida. Vivir de acuerdo con el bien espiritual — la honestidad y el desprendimiento, por ejemplo — puede tener un efecto expansivo, como se puede apreciar en este caso. No solo saca a relucir lo mejor que hay en uno, sino que también produce una respuesta espontánea en los demás. Cualidades maravillosas y de tipo espiritual, inherentes en cada uno de nosotros, tales como la magnanimidad, la generosidad, el aprecio e interés genuino, quizás latentes detrás de los elementos impuestos por el mundo como el de la desconfianza, el cinismo y la preocupación por nuestros propios problemas, salen al frente — como si fuera en celebración del bien que se ha vivido y observado. Más que meramente el apoyo de una conducta humana digna de alabanza, es prueba y promesa de que el expresar a Dios, el bien, produce más bien, y una alegría natural del uno con el otro.