Mucha Gente Está buscando la manera de protegerse y de proteger a sus familias de una sociedad que cada día se vuelve más violenta. Algunos toman cursos de defensa personal y otros compran armas; pero la verdad es que esas medidas, no nos pueden garantizar protección. Sin embargo, podemos encontrar una seguridad en la que podemos confiar, cuando nos apoyamos por completo en la omnipotencia y el cuidado amoroso de Dios, que cuida eternamente de nuestras familias y de nuestros hogares.
En la traducción de la Biblia de James Moffat, el Salmo 121 dice: "Alzo mis ojos a los montes; ¡oh! ¿de dónde vendrá mi socorro? El socorro viene del Eterno que hizo los cielos y la tierra... Nunca duerme el que te guarda" y el salmo concluye diciendo: "El Eterno te guardará de todo mal, él protegerá tu entrada y tu salida desde ahora y para siempre". Salmo 121:1, 2, 7, 8.
Las poderosas declaraciones acerca del cuidado que Dios nos brinda a todos nosotros (Sus hijos), expresado en el contenido de éste y de otros salmos, afirma que Dios está con nosotros protegiéndonos de toda forma de mal. Y en el libro de Isaías hay también una afirmación muy evidente del cuidado tierno y todopoderoso que Dios dispensa a Sus hijos: "Ninguna arma forjada contra ti prosperará". Isa. 54:17. Esto fue ilustrado en un incidente que tuvo mi familia.
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