Le Pedí A un amigo que había ganado premios nacionales de fotografía que compartiera conmigo algunas ideas básicas acerca de este arte. A medida que pensaba sobre algunos de los pasos que debían seguirse, vi como se relacionaban con la curación espiritual.
Primero hablamos acerca de la decisión que uno hace antes de tomar una fotografía. El fotógrafo elige un modelo, un punto sobre el cual centrarse. Mientras hablábamos me di cuenta de que nosotros tomamos esta decisión en nuestra vida. A veces sin estar conscientes de ello, tomamos como modelo a alguien que nos ha inspirado. La influencia de nuestro modelo es evidente en nuestra vida diaria.
Al meditar sobre esto, me dio mucha alegría comprender que mi estudio de la Ciencia Cristiana me ha revelado que Cristo Jesús es el modelo del cristianismo científico para la humanidad. La Sra. Eddy escribe en Rudimentos de la Ciencia Divina, al referirse a Jesús: "Su ejemplo es para los Científicos Cristianos lo que las obras de los maestros en música y pintura son para los artistas". Rud., pág. 3.
Jesús comprendió que el hombre es la imagen y semejanza de Dios. Véase Gén. 1:26, 27. Él vivió esta comprensión, reflejando el Cristo, la idea verdadera del Principio divino del ser del hombre. Él utilizó el poder del Cristo, la Verdad, para sanar el pecado y la enfermedad y resucitar al los muertos. ¿Acaso es posible que hoy día y en esta hora usted y yo podamos comprender a Dios y vivir de acuerdo con este Principio divino como hizo el Maestro del Cristianismo? Jesús contesta esta pregunta cuando nos aconseja: "El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque yo voy al Padre". Juan 14:12. Podemos conocer a Dios si seguimos el ejemplo de Jesús con fe y confianza en el Cristo que él reveló.
Mi amigo me dijo que después de elegir un modelo, el siguiente paso importante es la luz. Para iluminar determinado objeto se necesita una luz adecuada. La luz revela el modelo en su forma, perfil y color verdaderos a la vez que elimina las sombras que oscurecen la toma.
Jesús declaró: "Yo, la luz, he venido al mundo, para que todo aquel que cree en mí no permanezca en tinieblas". Juan 12:46. El ejemplo de su vida, nos proporciona la luz que capacita a la humanidad a comprender a Dios. Este entendimiento espiritual hace desaparecer la oscuridad de la ignorancia y del materialismo. Las enseñanzas y curaciones de Jesús revelaron la relación indisoluble que tiene el hombre con su Hacedor, mientras que al mismo tiempo libera al pensamiento de la esclavitud de los puntos de vista materiales acerca de la creación.
La lente de una cámara fotográfica forma una imagen al concentrar haces de luz. Ciencia y Salud, por la Sra. Eddy, al enfocar la luz espiritual en Dios, es como una lente pura y transparente, que revela a Dios y a Su creación a la consciencia humana. El estudio serio y sincero de la Ciencia del Cristo, nos impulsa a crecer en nuestra comprensión del Espíritu, el Amor, el mismo Dios que Jesús conoció y amó. A través de este estudio, comenzamos a sentir Su amor y a comprender el cuidado siempre presente y tierno que imparte a Su creación. El Amor tierno e imparcial nos inspira, elimina los temores y sana.
El siguiente paso es mantener el enfoque correcto, cuando permitimos, constante y firmemente, que el Espíritu sea nuestro punto focal; al seguir el ejemplo de Cristo Jesús, los embates de la mente mortal no nos pueden engañar. Pablo en el libro de los Romanos describe la mente mortal de esta manera: "Por cuanto la mente carnal es enemistad contra Dios; porque no se sujeta a la ley de Dios, ni tampoco puede". Rom. 8:7, según la versión King James. Es la creencia de que la vida e inteligencia están en la materia. Este es un concepto erróneo de la verdad que Jesús probó por medio de las curaciones que efectuó y con su propia resurrección. La existencia y la inteligencia son el reflejo de Dios que es Vida y Mente.
Debemos hacer una elección. Elijamos a Dios, el Espíritu y sigamos a Jesús en el camino a la libertad y la armonía.
La mente mortal parece distraer a la consciencia humana con falsas teorías, con "pobres modelos de pensamiento" que presentan al hombre como "caído, enfermo, pecador y mortal". Véase Ciencia y Salud, pág. 259. Pero debido a que la mente mortal no es ni una presencia ni un poder real, no puede verdaderamente atraer ni engañar al hombre. A medida que reconocemos este hecho científico, progresamos y seguimos los pasos de Jesús, obteniendo curación como la evidencia de nuestra creciente comprensión de Dios y de la relación del hombre con Él.
Una experiencia que tuvimos ilustra esto. De pequeño nuestro hijo era muy activo, lleno de energía, inquieto, interesándose por todo. Un día se enfermó y permaneció en cama muy callado negándose a comer o beber. Llamamos a un practicista de la Ciencia Cristiana para que nos apoyara mediante la oración, mientras yo me apoyaba en Dios para sanar a este niño. Tanto el Antiguo como el Nuevo Testamento de la Biblia relatan que el poder del Amor divino sana a los niños. Estas curaciones fortalecieron mi fe y esperanza de que por medio de la Ciencia divina este mismo Padre-Madre Dios, podía sanar a nuestro hijo.
En ese entonces una amiga que también era estudiante de la Ciencia Cristiana vino a visitarme una tarde. Ella me preguntó: "Si tu padre y tu madre estuviesen aquí con nosotros, ¿acaso no les confiarías el cuidado de este niño a ellos?" Esta idea era la "luz" que necesitaba en ese momento. La pregunta de mi amiga reafirmó la verdad de que Dios, nuestro Padre-Madre, estaba presente con nosotros en ese mismo momento, y yo podía confiar en el cuidado que le estaba brindando a Su hijo, Su idea.
Al percibir que la individualidad del niño era verdaderamente espiritual, el reflejo del ser de Dios, pude concentrarme, a través de la oración, en la verdad que nos hace libres. Véase Juan 6:32. La luz del Cristo corrigió la creencia falsa de que una idea del Principio divino pudiese estar separada del Principio. El niño mejoró inmediatamente y pronto sanó por completo.
La Sra. Eddy escribe en Ciencia y Salud: "Querido lector, ¿cuál es el cuadro mental o pensamiento exteriorizado que será real para ti — el material o el espiritual? A ambos no puedes tener. Estás manifestando tu propio ideal. Ese ideal o es temporal o es eterno. O bien el Espíritu o la materia es tu modelo. Si tratas de tener dos modelos, entonces prácticamente no tienes ninguno. Cual péndulo de reloj, serás llevado de un lado a otro, golpeando los costados de la materia y oscilando entre lo real y lo irreal". Ciencia y Salud, pág. 360.
Jesús nos dio la siguiente sencilla instrucción: "No podéis servir a Dios y a las riquezas". Mateo 6:24. Por lo tanto debemos hacer una elección. Elijamos a Dios, el Espíritu y sigamos a Jesús en el camino a la libertad y la armonía.
