Para El Año 1905 Mary Baker Eddy ya se había convertido en una figura prominente a nivel nacional. Los medios de comunicación de la época estaban concentrando cada vez más su atención en ella como la Fundadora y Guía del movimiento de la Ciencia Cristiana. Gran parte de este interés era hostil. Pero sin importar lo que estaba enfrentando, la curación cristiana seguía ocupando un lugar preeminente en su pensamiento.
El 25 de mayo de 1905, la Sra. Eddy le escribió a una de sus alumnas de muchos años:
La ayuda que necesito más que nada en el mundo para llevar a cabo la labor de mi vida, es una sanadora como lo fui yo cuando estaba en la práctica... Alcance ese punto, sane instantáneamente toda clase de enfermedades. Yo lo hacía así, y usted debe hacerlo también. Nuestro gran Maestro lo hacía y le pidió a sus seguidores que hicieran lo mismo. Usted puede ser tal sanadora y debe serlo para ser una Científica Cristiana. Ahora bien, apréstese a realizar este deber que le corresponde, vigile, ore, trabaje y ¡tenga fe! Sepa que usted puede ser lo que Dios requiere que sea y que ahora — Su imagen y semejanza — está reflejando a Dios, el único Sanador por excelencia, está reflejando a Dios, la Vida, la Verdad, el Amor. Documento de la Historia de la Iglesia: H00094, Departamento de Historia de La Iglesia Madre.
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