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Olvidé registrarme

Del número de noviembre de 2001 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana


Cuando tenía quince años decidí inscribirme en una escuela técnica de São Paulo para estudiar diseño gráfico. Tuve que dar un examen de ingreso, y puesto que había casi tres mil candidatos para cubrir sesenta vacantes, me sentí muy contenta de haber aprobado y haber sido aceptada en la escuela.

Los estudiantes tenían que registrarse un día determinado del mes. El día antes, mi madre dejó que me quedara a dormir en la casa de una amiga. Al día siguiente, me olvidé que debía registrarme. Pasé todo el día con mi amiga y, aunque sentía cierta ansiedad, no le presté mucha atención.

Cuando me di cuenta de mi error, me sentí horrible. Fui a la escuela con mi mamá, pero me dijeron que quienes no se habían registrado el día señalado habían perdido su lugar. Mi mamá no me criticó. En lugar de eso me sugirió que llamara a una practicista de la Christian Science para que orara conmigo para encontrar una solución. La practicista me recordó que el olvido y la distracción no formaban parte de mí porque era hija de Dios. Dios es la Mente infinita del universo, una mente que no se olvida de nada. Y como soy la creación y expresión de esa Mente, realmente no me puedo olvidar de nada. También hablamos que Dios nos pone en nuestro lugar adecuado. Nadie puede ocupar mi lugar ni yo tampoco puedo ocupar el lugar de otra persona.

Días después, fui de nuevo a la escuela, pero me dijeron lo mismo, que había perdido mi lugar. La practicista me dijo que siguiera confiando en Dios y me sugirió que hablara con el coordinador de la escuela, cuando me sintiera inspirada a hacerlo.

Continuamos orando. Al mes de haber comenzado las clases, pensé que sería bueno consultar de nuevo con la escuela. Y ese mismo día me pude registrar porque otra persona se había borrado.

Desde entonces he sido más alerta, y no he perdido ninguna fecha de entrega de trabajos. Todavía tengo que mejorar en lo que respecta a la puntualidad. Ya tengo dieciocho años trato de seguir mejorando.

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