Relatos de curación
Hace ocho años, comencé a despertar por las mañanas con la cara tremendamente hinchada. Tiempo después, en una visita al dentista, se descubrió que tenía quistes a ambos lados de la boca.
HACE algunos años, fui a un oftalmólogo para que me recetara lentes para leer. Después de examinarme, el médico me dijo que tenía glaucoma, que según él se debía a un problema de alta presión sanguínea en los ojos.
HABÍA estado enferma de cistitis recurrente por 40 años. A pesar de los medicamentos que tomaba y de los exámenes médicos a los que me sometía, siempre tenía recaídas.
Conocí la curación espiritual cuando mi hermana mayor sanó de una enfermedad terminal leyendo Ciencia y Salud. Yo comencé a leer algo sobre el tema tan sólo para ampliar mis horizontes.
DURANTE más de dos años, esporádicamente, sufrí de convulsiones ocasionadas por indigestión. En esa época, todavía vivía con mis padres y hermanas.
Durante ocho años estuve enferma de depresión. Si bien asistía a la Escuela Dominical, por un tiempo me resistí a recurrir a la Christian Science.
Durante varios años, tuve hemorragias constantes debido a un mioma que tenía en el útero. Eso me causaba muchos trastornos y preocupaciones.
Emma vive en Alemania a orillas de un gran río. Barcos de todas partes del mundo navegan río arriba y río abajo durante todo el día.
Me llamo Davi y tengo 5 años. Un día, estaba comiendo yogur durante la merienda y había unas abejas cerca.
Tengo un perro que se llama Bali. Hace como un año, mi papá y yo nos dimos cuenta de que la pata de Bali se veía dos veces más grande de lo normal.