En el año venía sufriendo desde hacía varios meses de un grave ataque de pleuresía que me incapacitaba trabajar. Cuando me encaminaba un día para consultar a un especialista me encontré con una señora que era practicista de la Christian Science. Ella me habló sobre su religión, y fué tan profunda la impresión que me causaron sus palabras que en vez de visitar al especialista le rogué me diera tratamiento. Accedió a esto ella pronta y muy afectuosamente, viéndome completamente sanado después del primer tratamiento. Un año después mediante la ayuda de la misma practicista fuí sanada al cabo de cinco días de hemorragias al estómago.
Me convertí entonces en miembro de una Sociedad de la Christian Science. Mientras llenaba mi primera posición, como organista en esa iglesia, fuí instantáneamente curada de catarro bronquial que venía repitiéndose desde hacía varios años. Esta curación se produjo a través del pensamiento que estaba yo cumpliendo con mi cometido para la gloria de Dios. Siguiendo a estas espléndidas curas he experimentado mediante la aplicación de las enseñanzas de nuestra amada Guía, Mary Baker Eddy, muchas otras bendiciones. Desearía mencionar una en particular.
En el año 1952 fuí atropellada por unciclista. Mientras iba cayendo declaré la omnipresencia de Dios en estas palabras: “Padre celestial, Tú estás aquí,” al mismo tiempo que me aferraba a la “declaración científica del ser” contenida en el libro de texto de la Christian Science, Ciencia y Salud por Mrs. Eddy.
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