Estoy muy agradecida por la Christian Science y desearía expresar mi gratitud por la curación de una papera. Un día mientras sufría de esta dolencia, una vecina me dijo que ella era una estudiosa de la Christian Science y que se sentiría feliz de decirme cómo podía yo procurarme ayuda. Me dió el nombre de una practicista y cuando la llamé, pidiéndole que me ayudara, ella accedió gustosa. La curación no se evidenció por algún tiempo, así es que me puse a estudiar con ahinco; pero se me alentó a ir adelante sin mirar atrás. Finalmente toda la papera que abarcaba la mitad de mi cuello, desapareció, sin que jamás haya vuelto a reaparecer.
Una verruga que tenía en uno de los dedos de la mano me molestaba mucho al trabajar. A pesar de que frecuentemente había declarado la verdad de que la materia es irreal, la verruga obstinadamente seguía manifestándose. Con la ayuda de las Concordancias de la Biblia y las obras de Mrs. Eddy me puse a trabajar con todo lo que se relacionaba con la obstinación. Como resultado de mis estudios la verruga desapareció, apercibiéndome que la Mente divina es el único poder sanador. Esta curación se llevó a cabo hacen doce años y ha sido permanente. El recuerdo de esta curación ha sido para mí un sostén sobre el cual me he apoyado en momentos de prueba.
Le estoy tan agradecida a Dios por Cristo Jesús, quien nos señaló el camino de la Vida, y por Mrs. Eddy, cuyas enseñanzas nos guían a caminar en él. Considero como una de mis más preciadas bendiciones el privilegio de haber recibido instrucción facultativa de esta Ciencia de una maestra amorosa. — Norman, Oklahoma, E.U.A.
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