Nuestra Guía, Mary Baker Eddy, nos dice en The First Church of Christ, Scientist, and Miscellany (La Primera Iglesia Científica de Cristo, y Miscelánea, pág. 239): “La Ciencia de las Escrituras coexiste con Dios; y ‘Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras’ relega al Cristianismo a su base primitiva, donde la razón, la revelación, el Principio divino, las normas, y la práctica del Cristianismo familiarizan al estudioso con Dios. En la medida que la Christian Science es estudiada y comprendida, la humanidad podrá como lo hizo antiguamente embeber el espíritu y probar la validez práctica y el poder redentor del Cristianismo sanando toda clase de enfermedad y venciendo al pecado y la muerte.” Mrs. Eddy también dice (ibid., pág. 203): “Todo lo tenéis en vuestros libros de texto.”
En esta Sala de Lectura tenemos el privilegio de participar en el continuo desenvolvimiento que la humanidad está alcanzando a través del estudio de nuestro libro de texto en su esfuerzo por percibir este poder. A diario se registran curaciones llevadas a cabo mediante tal estudio. Creencias de afecciones al corazón, pulmonía, enfermedades mentales, discordias en el hogar y la oficina y la falta de amigos se han desvanecido todas cuando en la Sala de Lectura el estudiante se ha percatado que Dios es Todo-en-todo y que el hombre es la expresión de Dios.
El poder del Amor divino, revelado en nuestro libro de texto, Ciencia y Salud, es tan eficaz que extraños que no conocían esta verdad han experimentado curaciones maravillosas. Una mujer que vino una tarde a nuestra Sala de Lectura le preguntó a la bibliotecaria si la Christian Science le podría ayudar. Su hijo había quedado paralizado repentinamente y lo habían llevado al hospital. Los médicos opinaban que el muchacho tenía sólo un diez por ciento de posibilidad de vivir y, si sobrevivía, no podría caminar nunca más.