Cuando un miembro de su familia va llegando al término de su adolescencia y se resiente por su consejo o dirección, se rebela contra su autoridad, pone en tela de juicio su opinión o rechaza su norma de vida con un ataque verbal, es posible que sienta usted como si tuviera clavado un cuchillo en su corazón. ¿Qué puede usted hacer ante semejante caso?
Reaccionar de la misma manera es, a menudo, el impulso; o bien, romper a llorar entregándose a la autocompasión. A veces el afligido lamento es: ¿Qué culpa tengo yo en esto?
Ante tal situación, ¿qué medida eficaz puede uno tomar?