¿Estoy creyendo
— equivocadamente —
que el bien es limitado?
Perdóname, Padre
por no saber percibir
la magnitud
de Tus beneficios.
Enséñame a sentarme, humilde,
a los pies de la Mente,
y a aceptar la abundancia:
la inspiración que ya es mía.
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