Skip to main content Skip to search Skip to header Skip to footer

Mi verdadero trabajo

Del número de noviembre de 1999 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana


En mi segundo año de universidad, quería encontrar un trabajo relacionado con mis estudios. Busqué en todos lados, pero no me contrataban en ninguna parte. Decían que era demasiado joven y que no tenía experiencia.

Un domingo, antes de abrir el diario para recortar la sección de clasificados de empleo, oré. Reconocí en mi corazón que Dios es supremo, y que no hay nadie más importante que Él ni con más influencia que Él. Entonces, encontré un anuncio apropiado y envié mi curriculum vitae. A los pocos días, me llamaron de esa empresa para que fuera a una entrevista.

De camino a la entrevista, me di cuenta de que estaba pensando negativamente. Estaba actuando como alguien que está amargado porque no tiene empleo. Comprendí que en lugar de eso tenía que ponerme a pensar los pensamientos que Dios me estaba enviando. Uno de esos pensamientos fue el siguiente: Dios me ha dado cualidades espirituales especiales para que las exprese. El expresar esas cualidades es mi verdadero trabajo.

Iniciar sesión para ver esta página

Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!

Para explorar más contenido similar a este, lo invitamos a registrarse para recibir notificaciones semanales del Heraldo. Recibirá artículos, grabaciones de audio y anuncios directamente por WhatsApp o correo electrónico. 

Registrarse

Más en este número / noviembre de 1999

La misión del Heraldo

 “... para proclamar la actividad y disponibilidad universales de la Verdad...”

                                                                                                          Mary Baker Eddy

Saber más acerca del Heraldo y su misión.