1) ¿Cómo dejo de meterme en relaciones que me perjudican?
Reconocer que una relación es mala, ya es un paso en la dirección correcta. Pero no es normal sentir atracción por algo que no promete ser lo mejor para uno. La única atracción real que sentimos es la que está dirigida hacia cosas buenas; hacia cualidades que nos hacen sentir felices y satisfechos, como la generosidad, la amabilidad, la honestidad, la pureza, el buen humor. Estas cualidades vienen de Dios. Y Dios es el bien. Hay una frase en Ciencia y Salud que nos ayuda cuando pensamos en las relaciones. Dice simplemente: "No hay sino una sola atracción real, la del Espíritu" (pág. 102). Cuando una relación tiene este fundamento, es una relación sana.
2) Hace alrededor de un año, dos de mis mejores amigos comenzaron a robar cosas de un negocio. Cuando me negué a hacerlo con ellos, se volvieron en mi contra. Ahora tengo miedo de salir de casa. También han intimidado a mis otros amigos para que no me hablen. Me han arruinado la vida. ¿Qué puedo hacer?
Si fuiste amigo de esta gente, tienes que haber visto algo bueno en ellos. El hecho de que ahora se estén comportando tan mal, no ha cambiado la bondad que es natural y verdadera en ellos. El odio sólo puede crecer donde no hay amor, de modo que la solución es tener la disposición de amar más. Esto no quiere decir que permitas ser pisoteado. Pero sí significa que debes expresar más compasión. Jesús tenía mucha experiencia en este sentido. No dejó de amar a amigos que lo traicionaron, aun a aquellos que lo querían matar. Él nos aconseja seguir su ejemplo: "Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen", dijo (Mateo 5:44).
3) Quiero estudiar arte, pero mis padres piensan que no es un estudio muy práctico. ¿Cómo los puedo convencer de que me tomen en serio?
Puede que nunca logres convencer a otras personas de que te tomen en serio. Pero tal vez ésa no sea la cuestión. ¿Acaso no es Dios, tu verdadero Madre-Padre, la "persona" más importante en tu vida? Te creó como la expresión individualiza de Sí Mismo. Y ciertamente no necesitas convencer a Dios de que tome en serio algo que ha creado. La verdad es que tú no dependes de otro ser humano para desarrollar tus talentos, o cumplir los deseos que son realmente buenos para ti. La Biblia dice: "Porque de él [Dios], y por él, y para él, son todas las cosas" (Romanos 11:36). Para nosotros esto significa que, 1) los talentos que tenemos son de Dios porque somos Su imagen y semejanza; 2) los recursos y oportunidades para desarrollarlos nos vienen por medio de Él (no de una cuenta bancaria ni de otra persona); y 3) la gloria de lo que logramos siempre es de Él. Y tus padres verán el ejemplo de responsabilidad que manifiestas al expresar los talentos que Dios te da.
4) Acabo de mudarme con mi familia, y estoy teniendo problemas para adaptarme en la escuela de esta ciudad. Extraño a mis amigos. ¿Cómo puedo sentirme cómodo con los demás?
¡Qué oportunidad tienes de hacer nuevos amigos! Puede que esto no sea lo que quieres escuchar cuando acabas de separarte de tus amigos de siempre y de una determinada vida familiar. Pero por un momento considera la situación desde una perspectiva diferente. En lugar de pensar que estás perdiendo a tus viejos amigos, recuerda las cualidades maravillosas que ellos expresan. Comprende que originalmente todas ellas provienen de Dios. Luego, lleva contigo a tu nueva escuela estas cualidades otorgadas por Dios. Observa cómo tus futuros amigos expresan esas mismas cualidades.
5) Mi novio y yo sentimos mucha atracción el uno por el otro. Yo considero que no está bien tener relaciones sexuales antes del matrimonio, pero no estoy segura por qué. ¿Me podrían ayudar a resolver esta disyuntiva?
Por una parte, la abstinencia puede evitarte los riesgos que entraña tener relaciones antes del matrimonio, por ejemplo el embarazo. Pero lo mejor de todo es que si te abstienes ahora, tú y tu novio podrán mantener su respeto propio y también preservar la oportunidad de compartir esta experiencia tan especial cuando se casen.
Ciencia y Salud tiene un capítulo sobre el matrimonio que explica por qué la pureza tiene un efecto diferente en el mundo. Dice: "...es la castidad y pureza, en contraste con las tendencias degradantes y la gravitación hacia lo terrenal del sensualismo y de la impureza, lo que realmente comprueba el origen y la eficacia divinos de la Ciencia Cristiana" (pág. 272). Ten confianza, sabiendo que estás esperando bajo la protección y la ley de Dios a que llegue el momento apropiado para expresar plenamente tu amor dentro de la santidad del matrimonio. ¡Vale la pena esperar!
6) ¿Hay alguna fórmula para orar? Si es así, ¿cuál es?
Jesús dijo: "...cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público" (Mateo 6:6). Se refiere a un aposento mental, o espiritual, donde los pensamientos negativos se dejan afuera.
Hay todo un capítulo de Ciencia y Salud dedicado a la oración. Allí encontrarás muchas respuestas. Pero el libro nunca da una fórmula para orar. Habla en cambio de las cualidades espirituales e inspiración que la acompañan. Comienza el capítulo de este modo: "La oración que reforma al pecador y sana al enfermo es una fe absoluta en que todas las cosas son posibles para Dios —una comprensión espiritual de Él, un amor desinteresado" (pág. 1).