Antes De Descubrir la Christian Science, Mary Baker Eddy pasó años investigando la relación que existe entre la mente y el cuerpo. Llegó a la conclusión de que toda buena salud es producida por la Mente divina, Dios, y que el cuerpo se gobierna armoniosamente por medio de la obediencia a la Mente, por una confianza en la Verdad, una confianza que va mucho más allá de la mera creencia, y que culmina en una fe absoluta y una comprensión científica: “saber que Dios es el único grande y siempre presente alivio del dolor humano”. (Mary Baker Eddy, Retrospección e Introspección, pág. 31).
Empezó a buscar un sistema de curación eficaz que tuviera en cuenta la bondadosa gracia de Dios y el cuidado práctico que imparte Su amor.
Desde su infancia, la Sra. Eddy vislumbró la realidad espiritual de la presencia sanadora de Dios. Se había sanado a sí misma y a los demás mediante la oración y el apoyo natural en Dios. De este modo conoció por experiencia propia lo cercano e importante que es el amor de Dios. Pero no encontró en la iglesia de su juventud una cura permanente de las enfermedades crónicas que tenía, y tampoco podía sanar a sus vecinos ni seres queridos de una manera sistemática. Por lo tanto, Mary y su familia recurrieron a los sistemas curativos de su época para el cuidado de su salud. Mary muy pronto se dio cuenta de que era “esclava de las teorías prevalecientes” Church History document: V00801. Departamento de Historia de La Iglesia Madre. sobre la salud, sin poder encontrar solución a sus males. La impotencia de la materia médica para sanarla, además de su deseo sincero de comprender las “cosas divinas”, hizo que se esforzara “diligentemente por saber que Dios es el único grande y siempre presente alivio del dolor humano”.Retrospección e Introspección, pág. 31.
Fue así como empezó a buscar un sistema de curación eficaz que tuviera en cuenta la inmensa gracia de Dios y el cuidado práctico que imparte Su amor. Tal búsqueda transformó a esta joven de New Hampshire en una pionera científica, una descubridora y exploradora que escaló las alturas de la curación mental científica. Al recordar esa travesía, ella resumió posteriormente sus hallazgos en una conclusión firme y categórica: “Existen dos métodos para tratar la enfermedad: Uno es a través de la materia; el otro es a través de la mente. Uno es un método material; el otro es un método espiritual o la acción de la Verdad sobre la mente y el cuerpo”. Church History Document: A10585C. La Descubridora de la Christian Science se negó a mezclar estos dos métodos antagónicos, y sin titubeos decidió basar su sistema de curación cristiana en el poder absoluto de la Mente divina.
La Sra. Eddy pasó su vida en un viaje de descubrimiento científico. Después de publicar Ciencia y Salud dedicó el resto de su vida a mejorar su propia comprensión y enunciación de “la Ciencia espiritual de la curación por la Mente”, a enseñar a otros a sanar como sanó Cristo Jesús, y a fundar instituciones que protegieran y perpetuaran su descubrimiento.Ret., pág. 34.
“Lo que hice primero al sanar fue la manifestación del poder divino no comprendido. Lo que hago ahora en la curación es la manifestación de la gracia y la comprensión espiritual”.
La culminación científica de la labor pionera de la Sra. Eddy se podría resumir con las palabras que ella escribió en una de sus muy usadas Biblias:
“Primero di al mundo la Verdad, la Vida y el Amor que me fueron revelados. Ahora le doy al mundo la Verdad, la Vida y el Amor que estoy viviendo. Al principio no comprendía, pero podía contar lo que se me revelaba. Ahora comprendo, y puedo dar testimonio por experiencia propia. Lo que al comienzo hice al sanar fue una manifestación del poder divino no comprendido. Lo que hago ahora en la curación es la manifestación de la gracia y la comprensión espiritual.
Mary” Church History document: AA17 v. 1.
Extracto resumido de The Christian Science Journal [Marzo de 1997].
