es practicista y maestro de la Christian Science; reside alternadamente en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, y en Sydney, Australia. Cuando era redactor de The Christian Science Journal y de las otras revistas religiosas producidas por La Sociedad Editora de la Christian Science, escribió alrededor de 425 artículos sobre espiritualidad y metafísica. , de la redacción del Journal, habló con él en su apartamento de Manhattan.
¿Cuál es la clave para sanar espiritualmente y con éxito enfermedades y otros problemas que enfrenta la gente?
Es la ESPIRITUALIDAD. No es una palabra demasiado grande, pero sí un concepto enorme. Eso es lo principal. Ahora bien, ¿qué es la espiritualidad? Pienso que básicamente está relacionada con las cosas de Dios más que con las cosas de la vida material. Tiene mucho que ver con los valores que uno tenga: lo que es y no es importante para uno. Pienso que es una cuestión que se define individualmente; puede que la espiritualidad sea muy diferente para otra persona de lo que lo es para mí.
¿Existe algún denominador común? Por ejemplo, ¿puede la espiritualidad incluir que se acepte el espíritu de la Regla de Oro, que tiene que ver con la manera de comportarse con las demás personas?
Sí, eso sería un derivado de la espiritualidad, pero pienso que eso tiene que ver más con el campo de la moralidad, que trata de las actitudes y el comportamiento humanos; mientras que la espiritualidad es más que eso. Las personas pueden ser muy morales o éticas, y no tener pensamiento espiritualizado, en el sentido de creer en Dios y esforzarse por comprenderlo, y así vivir la vida basándola en Su naturaleza. Pienso que la espiritualidad está muy relacionada con la naturaleza divina, y con el carácter del ser verdadero del individuo como la expresión o reflejo de Dios.
Otro punto sobre la espiritualidad es que es algo que se siente. Cuando alguien es de pensamiento espiritualizado, lo puedes sentir; puedes sentir la presencia de la espiritualidad. Si estuvieras en un cuarto lleno de personas que son muy morales, no estoy muy seguro de que pudieras sentir algo en particular. Pero en un cuarto, una iglesia o un templo lleno de personas de pensamiento espiritualizado, pienso que sentirías la espiritualidad, porque sería tangible.
La espiritualidad tiene que ver con las cosas de Dios.
Esto me recuerda que hace poco comentaste que “es algo que se siente”; Dave Hohle habla con Geoffrey Barratt, “The human and divine coincidence”, Journal, Febrero 2002, págs. 33-36. que la espiritualidad y la relación con Dios van más allá del intelecto, que son algo del corazón.
Sí, es muy cierto. Los sentimientos son sumamente importantes en la Christian Science. No se trata simplemente de un conjunto de palabras, sino que se siente. La curación espiritual no pertenece tan solo a la mente humana, sino que es algo que se siente. Pero, claro es difícil definir lo que siente. No hay una receta sencilla para sentirse cerca de Dios, no hay una técnica para lograrlo; es muy individual. El anhelo de alcanzar espiritualidad es casi instintivo e intuitivo y, ciertamente, es algo natural.
¿Cuál es el mayor obstáculo para la curación espiritual?
La materialidad y la personalidad. Es el creer que uno es una persona que existe separada de Dios. Mary Baker Eddy dice: “No hay personalidad, y es más importante saber esto, que saber que no hay enfermedad”. L05468, carta a Ann M. Otis, 12 de abril de 1893. Cada individuo es la imagen del Principio divino, y el Principio no es una entidad personal. Si aceptas que eres un ser físico, una personalidad física, estás obstaculizando tu comprensión de lo que realmente eres; y no estás descubriendo tu identidad, sino que te estás manteniendo alejado de ella. La persona humana, como tal, es en realidad la percepción equivocada del reflejo de Dios. Los Científicos Cristianos se niegan a considerar a Dios como alguien que tiene brazos, piernas, etc., a semejanza del hombre. Y el individuo verdadero — el verdadero tú, yo y todos los demás — por ser la manifestación de Dios, también es incorpóreo; está compuesto de ideas espirituales.
Si aceptas que eres un ser físico obstaculizas la comprensión de lo que eres.
¿Podrías hablar un poco sobre cómo se efectúa la curación espiritual?
Se efectúa porque la espiritualidad es la transparencia del Espíritu. La curación da a Dios una oportunidad, por así decirlo, de ser Espíritu, de estar presente, y de estar en operación. Mientras que la materialidad mantendría alejado a Dios de nuestra experiencia. Y es la presencia de Dios — comprendida, reconocida y sentida — lo que sana. La Christian Science considera la salud desde un punto de vista muy particular. Un Científico Cristiano no ve la salud de la misma manera que un médico o el hombre y la mujer comunes, quienes generalmente entienden que tener salud es tener un cuerpo físico que funciona bien. Para el Científico Cristiano, la conciencia verdadera es la sustancia de la salud real; y esta visión de la salud no es física. La experiencia humana expresa el pensamiento humano, y cuando el pensamiento humano es más espiritual, más vuelto hacia Dios — el Principio — , cambia y mejora la experiencia de la persona.
Una de las muchas maneras en que Mary Baker Eddy explica cómo se efectúa la curación espiritual, es cuando dice en Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras: “Cuando nuestra creencia falsa es corregida, la Verdad envía un mensaje de salud por todo el cuerpo”.Ciencia y Salud, pág. 194. La creencia incorrecta a la cual se refiere, es un concepto erróneo del ser que se corrige cuando es reemplazado por el correcto. Es como creer que tres por tres son diez, que es un error, y luego corregirlo con la verdad de que tres por tres son nueve. La enfermedad proviene de creer que las personas son algo diferente a lo que realmente son, de creer que no son creadas por Dios. Proviene de la convicción de que son mortales físicos y orgánicos; proviene de la creencia de que pueden estar separadas de Dios. Y la curación se efectúa cuando se corrigen tales creencias. Finalmente, la curación espiritual tiene que ver con la mente humana — con todas sus creencias, temores e imágenes de enfermedad — la cual retrocede o se hace translúcida a la verdad del ser; volviéndose transparente conforme la persona crece espiritualmente y acepta los valores espirituales.
¿Oras de manera diferente en un caso que no cede, en el que pasa mucho tiempo sin que la persona sane?
Ésa es una buena pregunta. Como sabes, cada caso de discordia es individual, y yo no los trataría de la misma manera. Algunas veces, sólo tienes que afirmar la verdad que ya has reconocido y sentirla profundamente. Debes recordarte qué es la verdad y saber que opera universalmente. Puede haber un caso donde sientas o detectes que la persona se está aferrando a algo que sería mejor que soltara, y puedes señalárselo; esto es totalmente una cuestión de inspiración y de intuición. Uno nunca debería abandonar el punto de vista espiritual, y pensar: “Bueno, aquí hay algo que es incorrecto y que no se ha corregido, y tal vez no se pueda corregir”. A menudo pienso en lo que Mary Baker Eddy dice en Ciencia y Salud: “A fin de razonar correctamente, debiera haber un solo hecho ante el pensamiento, a saber: la existencia espiritual”. Ibid., pág. 492. Para el sanador espiritual esto es básico, es lo primero que debe mantenerse en el pensamiento.
También yo diría que la paciencia es importante, pero no consiste meramente en sobrellevar las cosas. A veces, se puede tener una percepción muy clara de la identidad real, que es espiritual, impersonal y perfecta. Pero esto no necesariamente cambia de inmediato la experiencia; puede que se tenga que mantener firme y pacientemente esa percepción. Se requiere el deseo de perseverar en la senda que uno considera correcta. Algunas veces, se tiene la idea de que la Christian Science siempre opera de una manera muy sencilla, y que no requiere de esfuerzo; y en algunos casos es así, y es muy impresionante. Pero a menudo, la Christian Science exige que las personas desarrollen aún más su comprensión de Dios, y que comprendan mejor quiénes son realmente, por ser obra de Dios.
Si comprendes tu identidad real te vuelves sensible a lo que se opone a ella.
Mary Baker Eddy fue muy directa respecto al temor. “Comenzad siempre vuestro tratamiento apaciguando el temor de los pacientes”, ibid., pág. 411. dice en Ciencia y Salud. ¿Qué te ha enseñado la experiencia respecto a hacerle frente al temor?
He aprendido muchas cosas que confirman el consejo que ella dio. He notado que para calmar el temor se empieza con Dios, identificándose uno con Él, al igual que al paciente; y afirmando el hecho de que tanto tú, como el paciente están sintiendo sólo lo que Dios siente: tranquilidad, perfección y calma. Así que, si al orar por alguien sientes temor, ansiedad o estrés, esto te ayuda a eliminarlos de inmediato.
El deshacerse del temor, en cualquiera de sus formas, tiene mucho que ver con sentir lo que realmente es Dios, sentir Su presencia y poder. Esto proviene de una convicción verdadera de lo que está sucediendo en el reino espiritual, y una certeza absoluta sobre lo que es real, y lo que no lo es. Esta certeza por parte del sanador espiritual se transmite y va adonde se necesita. Me gusta la frase de Ciencia y Salud que dice: “La confianza inspirada por la Ciencia descansa en el hecho de que la Verdad es real y el error es irreal”. ibid., pág. 368. Si esto se ha hecho cierto en el pensamiento del sanador entonces es una manera poderosa de enfrentar el temor.“La Verdad es real y el error es irreal”, esto es categórico y claro. En cuanto a la relación de persona a persona, he visto que hay cosas que uno podría comunicar a los pacientes sobre su naturaleza verdadera o sobre la presencia de Dios, que ciertamente los ayudará a tranquilizarse y a calmar su temor. Insisto, uno debe confiar en la intuición.
Parece que la intuición es algo muy importante para ti.
La intuición está íntimamente relacionada con el sentir. Hay un nivel en el cual el practicista de la Christian Science ha alcanzado una determinada experiencia en la vida y con los seres humanos, que le permite ser intuitivo al tratar con alguien, en lo que llamaríamos una relación de persona a persona. Y más importante aún, cuando uno comprende la naturaleza de la realidad, percibe más claramente lo que no es real, pero pretende serlo. La intuición va más allá del razonamiento humano o del juicio del carácter humano, porque tiene una base espiritual. Puedes ir a un lugar, y sentir que algo anda mal, y esto es porque el sentido espiritual de las cosas ha sido agraviado de alguna manera. Cuando las personas espiritualizan su pensamiento están más conscientes de lo que parece estar equivocado. Por ejemplo, cuando tienes muy buen oído para la música, y vas a un concierto sinfónico, fácilmente te percatas si un violín toca una nota equivocada, porque es algo discordante para tu oído musical. Mientras que alguien que no tenga ese don, ni siquiera lo notará. Si comprendes claramente cuál es tu verdadera identidad — que eres la manifestación de Dios — entonces eres sensible a lo que se oponga a esa verdad.
La Biblia y Ciencia y Salud destacan el poder espiritual. Muchas personas puede que se pregunten qué es el poder espiritual exactamente, y cómo obtenerlo para sanar y hacer buenas obras.
El poder espiritual es el poder del Espíritu, Dios. No es una habilidad personal ni una característica de la personalidad. Es tener la disposición para hacerse a un lado, y permitir que el Espíritu se perciba en toda su magnitud y en todo su irresistible poder. No es una habilidad que algunos hombres o mujeres tienen, y otros no; es el poder de la presencia de Dios, de la totalidad de Dios que es irresistible. El reconocerlo y aceptarlo, es una gran influencia para bien. Es por eso que la espiritualidad es tan importante para la curación espiritual; porque con la espiritualidad uno está cada vez menos confundido e intimidado por la apariencia material de los problemas y el sufrimiento.
Es importante recordar que estás tratando fundamentalmente con la Verdad que corrige el error, y que la Verdad tiene poder espiritual infinito para hacerlo. Humanamente, lo podemos interpretar como cuando un practicista de la Christian Science sana a alguien que tiene sarampión. Pero el hecho fundamental es que la Verdad está corrigiendo el error. En realidad, no tiene nada que ver con las personas, aunque así parezca. No hay técnica para hacerlo. Tiene que ver mucho con la intuición, la espiritualidad, el sentido espiritual y la convicción espiritual. Y para entender la vitalidad del poder espiritual es útil comprender el carácter subjetivo de la experiencia humana — en otras palabras, que toda experiencia está realmente dentro del pensamiento, y no fuera de él — para comprender que, básicamente, tratamos con el pensamiento. El poder espiritual tiene un efecto contundente en el pensamiento humano.
Tanto la Biblia como Ciencia y Salud ponen énfasis en el amor. Por ejemplo, en este último leemos: “La parte vital, el corazón y alma de la Ciencia Cristiana, es el Amor”. ibid., pág. 113. ¿Podrías compartir algunos pensamientos sobre el amor?
El amor es sumamente importante. Pero, ¿qué es? Podemos recordar que el Amor es equivalente a los otros seis sinónimos que Mary Baker Eddy da para Dios: Principio, Vida, Verdad, Alma, Espíritu y Mente. Véase ibid., pág. 115. Todos los sinónimos son equivalentes. A menudo el término amor se usa con mucho sentimentalismo, ¡las personas aman el amor! Quieren sentir que Dios los ama, y claro que lo hace. Pero la gente se conmueve mucho con el concepto de amor, más que con el concepto de Dios como Principio, digamos, o como Mente eterna. Por ejemplo, cuando escribimos una carta, firmamos “Con mucho cariño”. ¿Por qué no decimos: “Con mucha inteligencia”? Es tan importante ser inteligente como ser amoroso, porque el Amor y la Mente son sinónimos. La manera más elevada de amar a alguien es verlo como realmente es. Y verlo como realmente es, requiere que uno se ame a sí mismo y se vea como realmente es; entonces, estará preparado para ver a los demás en su verdadera naturaleza. Ésta es la esencia del amor. Lo grandioso del amor es que cambia nuestro punto de vista de lo personal a lo impersonal; de este modo, el poder espiritual se hace dinámico y tangible en el pensamiento y en la experiencia humana.
Es importante tener un pensamiento abierto a las ideas nuevas.
Hablando de “punto de vista”, observo que tu apartamento expresa la visión tan abierta que tienes del mundo. Tienes muebles y obras de arte modernos, y también cofres de madera y viejos manuscritos coreanos del siglo XIX. Cunando la gente recurre a la Christian Science en busca de maneras de estimular, renovar y enriquecer su vida más allá de la curación física, ¿qué importancia tiene la receptividad a nuevas ideas y la inclinación hacia el pensamiento de avanzada?
La Christian Science es una visión única de la existencia, una visión amplia del mundo. Hasta cierto punto, es algo existencial, y no sólo una forma de curar el cuerpo. El pensamiento abierto a lo que es fresco, valioso, hermoso y novedoso, es muy importante, y quizá viene al comprender que la Mente divina, la Mente única, es nuestra Mente. Porque la Mente es infinita, podemos decir que, en cierta forma, es una mentalidad de criterio muy amplio. Y la amplitud de criterio proviene del crecimiento espiritual. La Sra. Eddy tenía una visión muy amplia del mundo. Es importante apreciar las maravillas del mundo, así como la inteligencia, la habilidad, etc., y no siempre apreciamos suficientemente este aspecto. Están sucediendo muchas cosas maravillosas en toda la tierra, y para mí, es el resultado del Cristo que viene activamente al pensamiento humano; el Cristo, que es la verdad del Ser, que viene a nosotros del Principio divino de todo el universo.
¿Qué tan práctico es el Cristo y la Ciencia del Cristo en lo referente a sentirse seguro todos los días?
¿Qué puede ser más práctico en lo que se refiere a la seguridad que la certeza concreta de nuestra verdadera identidad, de nuestra individualidad siempre segura, tan eterna y segura como Dios? ¿De estar conscientes de nuestra naturaleza verdadera, y de ser esa naturaleza verdadera? Una de las cuestiones más prácticas de las que debemos darnos cuenta la expresa Mary Baker Eddy. Ella escribió respecto a Dios: “Él sostiene mi individualidad. No, aún más — Él es mi individualidad y mi Vida. Porque Él vive, yo vivo”.La unidad del bien, pág. 48.
