Nuestro amoroso Padre-Madre Dios siempre está presente, protegiéndonos y transmitiéndonos la guía que necesitamos y podemos entender. La oración y el estudio constantes nos permiten a cada uno de nosotros escuchar la voz de Dios y seguir Su guía.
Iniciar sesión para ver esta página
Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!