Querido lector:
En recientes entregas de esta columna, hemos hablado sobre las cualidades que contribuyen a un buen artículo, tales como la profundidad de la metafísica, la autenticidad de lo expresado y la cordialidad con que se comparte. Otra cualidad importante es que sea accesible.
Escribir con metafísica y discernimiento profundos no está en desacuerdo con escribir para toda la humanidad y hacer que nuestras palabras e ideas estén al alcance de todos. Por ejemplo, cuando escribimos y revisamos cualquier artículo, nos esforzamos por mantener nuestra atención centrada en lo siguiente: ¿Se conecta con los lectores de hoy? ¿Usa lenguaje e ideas contemporáneas? ¿Están los conceptos espirituales que compartimos escritos en un lenguaje claro que cualquiera pueda entender? Y ¿lo compartiría yo con alguien?
Iniciar sesión para ver esta página
Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!