“Las artes profiláctica y terapéutica (esto es, preventiva y curativa) pertenecen enfáticamente a la Ciencia Cristiana, como se vería fácilmente si la psicología, o la Ciencia del Espíritu, Dios, fuera entendida” (Ciencia y Salud por la Sra. Eddy, pág. 369). Durante mis cuarenta años como miembro de La Iglesia Madre, mi familia y yo hemos experimentado abundantemente las artes “preventiva y curativa” de la Ciencia Cristiana. Siempre que hemos seguido fielmente las enseñanzas de la Biblia y de los escritos de la Sra. Eddy, hemos tenido pruebas de la maternidad de Dios manifestada en protección de accidentes y de inclemencias del tiempo, incluyendo huracanes; inmunidad de las llamadas enfermedades de los niños; y curaciones de resfríos, gripes y dolores de cabeza. Muchas enfermedades no se desarrollaron. Fueron prevenidas mediante nuestras oraciones diarias; otras fueron curadas antes de que se diera un nombre a los síntomas. Me gustaría narrar algunas de las muchas curaciones que hemos tenido.
A comienzos de mi estudio de la Ciencia Cristiana, aprendí una muy valiosa lección al ser curada de una enfermedad cuando recurrí de todo corazón al estudio de la Biblia y de Ciencia y Salud. Aprendí la importancia de adherirme a los requisitos establecidos por la Sra. Eddy en el Manual de La Iglesia Madre para afiliarse a esta Iglesia (Art. IV, Sec. 1): “La Biblia, juntamente con Ciencia y Salud, y otras obras de la Sra. Eddy, serán sus únicos libros de texto para instruirse en la Ciencia Cristiana, y para enseñar y practicar la curación metafísica”.
Nunca me faltó un empleo bien remunerado, aun en épocas en que las agencias de empleo afirmaban que no habría nada en mi especialidad por varios meses. Una vez, cuando necesité trabajo, oré cada día para saber que Dios es mi único empleador y que mi único trabajo es reflejar la actividad espiritual del Amor y la Verdad siempre presentes. Al escuchar la dirección divina seguí el hilo de una información poco común acerca de una posición excelente, la cual obtuve.
Iniciar sesión para ver esta página
Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!