La Escuela Dominical: parte importante de un gran diseño
En un artículo intitulado “Ciencia Cristiana”, la Sra. Eddy escribe: “Hambrientos y sedientos de una vida mejor, la obtendremos, y nos convertiremos en Científicos Cristianos; llegaremos a comprender a Dios correctamente, y a conocer algo del hombre ideal, el hombre verdadero, armonioso y eterno. Este movimiento de pensamiento tiene que dar impulso a todas las eras: tiene que encauzar correctamente el razonamiento, educar los afectos hacia recursos más elevados, e impedir que el cristianismo sea influido por las supersticiones de una época ya pasada”.Escritos Misceláneos, pág. 235.
“La Iglesia en acción” este mes enfoca la Escuela Dominical como parte de un sistema educativo único.
Una superintendente habla sobre la educación espiritual
Cuando aceptó servir como superintendente de la Escuela Dominical, una Científica Cristiana halló que deseaba saber más sobre “profesionalismo espiritual” y cómo expresarlo en la Escuela Dominical.
“El término ‘profesionalismo espiritual’ se usa varias veces en las Recomendaciones para la Escuela Dominical de la Ciencia Cristiana. Al principio yo no podía encontrar una definición exacta de lo que el término significaba, pero a medida que fui pensando en lo que yo consideraba profesionalismo, me di cuenta de que debía aplicar a un propósito espiritual la misma certeza, el mismo conocimiento y la misma expectativa.
“Percibí que el comprender cuáles eran los medios básicos para la enseñanza le daría tiempo a la superintendente y a los maestros a orar por los asuntos importantes en la vida de los alumnos. Lo que se requería era una evaluación honesta y el deseo de que la enseñanza fuera más efectiva.
“Un maestro de la Escuela Dominical necesita escoger un concepto sencillo y saber cómo desarrollarlo. Es importante hacer las preguntas adecuadas si es que los jóvenes van a aceptar la Ciencia Cristiana como un método de vida. Los adultos quizás no se den cuenta de que los niños pueden comprender ideas abstractas, y aplicarlas.
“Los niños comprenden, pero frecuentemente no se les muestra un panorama más amplio ni tampoco se les muestra cómo la Ciencia Cristiana les da la habilidad de distinguir entre lo que es sustancial y lo que no es. Encuentro que los jóvenes ni son lentos ni les falta interés. Frecuentemente se aburren de escuchar las mismas historias una y otra vez.
“Mantener el interés de los alumnos significa tener un plan de estudios que se base en el Manual de la Iglesia y que prepare al joven para una mejor calidad de vida. Me pregunto por qué no preparamos a los niños y a los jóvenes para la vida académica. Para lograr esto nosotros hemos comenzado con los maestros de los alumnos mayores para saber qué debe enseñársele a un joven para prepararlo como un posible miembro de la iglesia y un ciudadano responsable. Hemos estado trabajando con todas las edades, comenzando con las mayores, etc., para establecer un plan de estudio.
“A medida que he visto que la Ciencia Cristiana es un sistema de educación, he comprendido más la importancia de la Escuela Dominical. El maestro puede ayudar al niño a desarrollar su capacidad de distinguir entre lo espiritual y material — entre el trigo y la cizaña — y ver que la Ciencia Cristiana no niega la vida; niega el materialismo y cuando esto se hace, la vida se vuelve más completa y beneficiosa”.
La buena enseñanza no está limitada a maestros profesionales
Damos a continuación una entrevista con una maestra de escuela secundaria que vive en los suburbios y también enseña a un grupo de adolescentes en una Escuela Dominical de una ciudad.
¿Qué ha hecho usted para dominar el miedo que a veces se asocia con la enseñanza?
Cristo Jesús tenía la autoridad espiritual que viene del conocimiento de lo que significa ser la expresión de la Mente. Y nosotros tratamos de emular el ejemplo de Jesús.
El temor se desvanece cuando basamos la enseñanza en la autoridad espiritual. La autoridad del Cristo está bien definida en la Biblia, y la Sra. Eddy explica la universalidad de esta autoridad: “El cristianismo de Cristo es la cadena del ser científico, que reaparece en todas las edades, manteniendo su correspondencia evidente con las Escrituras y uniendo todas las épocas en el designio de Dios. En la Ciencia divina no existen la emasculación, la ilusión ni la insubordinación”.Ciencia y Salud, pág. 271.
¿Cómo le muestra usted a los alumnos que la Ciencia Cristiana les da la habilidad de pensar por sí mismos?
El verdadero objetivo de la Escuela Dominical es el desarrollo de la intuición espiritual, y las historias bíblicas son de mucha ayuda. En una lección reciente la clase se interesó mucho por la historia de Gedeón. He aquí un campesino que se preocupaba mucho por los asuntos de gran interés en su sociedad. Los alumnos de la Escuela Dominical — entre las edades de 11 a 13 años — a menudo no se creen importantes, sin embargo, están muy conscientes de los acontecimientos sociales. La clase pudo comprender la situación de Gedeón — un hombre que amaba a Dios y fue lo suficientemente humilde para acceder a hacer lo que los militares de esa época probablemente consideraban una tontería.
¿Cómo alienta usted a los alumnos para que estudien por su propia cuenta?
Ocupándome de cómo puede aplicarse la Ciencia Cristiana a la vida de ellos. El otro elemento es el de desarrollar su “curiosidad” innata para que así busquen en todo momento el importe espiritual. Es cierto que a veces esto parece casi imposible, pero sí es posible orar haciéndonos preguntas.
¿Cómo creen los alumnos que la Escuela Dominical los ayuda en el diario vivir?
Un domingo hablamos sobre la diferencia que hay entre la escuela y la Escuela Dominical. Los alumnos insistieron en que la Escuela Dominical es un sitio prominente donde pueden obtener una educación espiritual. Opinaron que la Ciencia Cristiana les da un medio de juzgar el valor de sus experiencias; que la escuela, familia y vida social son un laboratorio donde se pone en uso los instrumentos espirituales.
En Romanos 15:4 nos dicen: “Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se escribieron”. Cuando he visto la naturaleza eterna de estas lecciones espirituales, he encontrado que los alumnos disfrutan al descubrir su herencia espiritual.
Una ayuda para el estudio de la Biblia
La versión Reina-Valera de la Biblia puede comprarse ahora con índice pulgar en las Salas de Lectura de la Ciencia Cristiana. Esta edición de la Biblia es en tela negra y su precio es US$8.50. También puede comprarse directamente escribiendo a: The Christian Science Publishing Society, One Norway Street, Boston, MA, U.S.A. 02115.
Cómo apoya un miembro de la iglesia a la Escuela Dominical
¿Cómo puede apoyar un miembro de la iglesia a la Escuela Dominical? Un activo Científico Cristiano brevemente explica su enfoque.
“Para mí la definición de ‘Iglesia’ en el Glosario de Ciencia y Salud incluye también el propósito de la Escuela Dominical. En forma similar, las definiciones de ‘hijos’ y ‘hombre’ deben aplicarse a cada uno de nosotros, sin distinción de edades. Si estoy demostrando que yo soy una de esas ideas espirituales de la Verdad y el Amor, entonces estoy apoyando a la Escuela Dominical. Si me aplico a mí misma la definición espiritual de ‘hijos’, de la misma manera debo de aplicar la definición de ‘hombre’ a mi concepto de hijos.
“Si apreciamos nuestra compleción, no podemos pensar que los niños sean inmaturos. Así como a un niño se le enseña a ver a Dios como su Padre-Madre, igualmente ningún adulto, en ninguna circunstancia, debe verse “sin hijos” — como si no tuviera nada que ver con ellos. Hacer esto sería negar que todos somos ‘los pensamientos espirituales y representantes de la Vida, la Verdad y el Amor’ Ciencia y Salud, pág. 582., como define la Sra. Eddy el concepto de ‘hijos’. He aprendido a aceptar a la gente joven en mi vida, comoquiera que se presenten.
“Pero para ofrecer la clase de ambiente conducente a la educación espiritual, he tenido que educarme constantemente en lo moral y espiritual evaluando mi pensamiento. ¿Obedezco la ley moral y la espiritual? ¿Demuestro dominio espiritual propio y anhelo inocencia y receptividad? Otra manera de mantener una actitud como la de un niño es rechazando las imágenes falsas de los niños dondequiera que se presenten y cuando aparezcan.
“A medida que he ido estudiando para ganar una percepción más amplia de la iglesia y de la Escuela Dominical, me he vuelto más consciente de los frutos que trae la Escuela Dominical y de los desafíos que ésta presenta. Esta labor también me ha indicado algo sobre el lugar que ocupa la Escuela Dominical en la comunidad. A menudo busco en la comunidad algo que exprese a la Iglesia, pero ahora también busco algo que exprese a la Escuela Dominical”.
[Extractos compilados de la Sección “Church in Action” del The Christian Science Journal]