Personas de diferentes credos religiosos pueden concordar en que la oración sincera a Dios es una ayuda eficaz para sanar las enfermedades. Mas a veces se les pregunta a los Científicos Cristianos: Si bien Dios es la fuente de la curación, ¿no son los médicos vías por las cuales Dios obra?
Esta pregunta es lógica y merece atención pues, aparte de sugerir que los médicos son vías de Dios para curar a los enfermos, involucra a menudo otra pregunta: ¿Por qué, entonces, los Científicos Cristianos no consultan a los médicos? Al no hacerlo, ¿no se privan acaso de la ayuda divina?
No hay duda de que la mayoría de los médicos tienen en común con los Científicos Cristianos el propósito de ayudar y sanar a la humanidad. No obstante, hay una diferencia en sus respectivos puntos de vista sobre lo que constituye la curación.
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