Cómo se cursa una colaboración que no se envía en inglés
[Non-English manuscripts]
Cuando un colaborador envía un artículo, testimonio o poema al Departamento de Redacción del Journal, Sentinel y Heraldo en un idioma que no es el inglés, lo primero que se hace es traducirlo al inglés, de manera que nuestros Redactores de habla inglesa puedan analizarlo.
Acusamos recibo de cada manuscrito. Con los artículos, si es de nuestro conocimiento que el colaborador sabe inglés, le preguntamos al momento de acusarle recibo si le gustaría o no recibir una prueba editada de su manuscrito en el idioma original y en inglés, en el caso de que su colaboración fuere aceptada. A menos que el autor solicite una prueba en el idioma original, sólo le enviamos para su aprobación una prueba en inglés. Si ignoramos si el colaborador sabe inglés, entonces sólo le enviamos la prueba en el idioma original.
El Departamento de Traducciones no escatima esfuerzos para cerciorarse de que la traducción al inglés refleje exactamente la idea expresada en el original. Las colaboraciones no son editadas por los traductores. Sólo los Redactores deciden si una colaboración es aceptable para publicación.
La decisión depende de muchos factores, los cuales incluyen: exactitud de los conceptos metafísicos; grado en que el contexto guía al lector a obtener una comprensión más clara de la realidad espiritual; desarrollo lógico del tema; originalidad para presentar la Ciencia Cristiana. Cada manuscrito lo revisa, por lo menos, uno de nuestros Redactores Adjuntos.
Una vez que la colaboración ha sido editada en el inglés, y en el caso de que haya sido aceptada para publicación, el manuscrito editado se “traduce” a su idioma original. El Departamento de Traducciones se esfuerza en todo lo posible por conservar al máximo la fraseología del contexto original. Pero si la colaboración, al ser editada en el inglés, ha requerido muchos cambios, no siempre es posible ajustarse a este intento. Los cambios en la fraseología original generalmente se hacen sólo para adaptar el original al inglés editado, o para corregir puntos gramaticales y de estilo que necesitaban corregirse en el manuscrito original.
Si bien no siempre puede que los traductores y nuestro Departamento de Redacción elijan las palabras que el colaborador hubiera elegido en aquellas mismas oraciones específicas, no obstante, todos tratamos de respetar con la mayor fidelidad el estilo y el vocabulario del autor. Mas hay que tener en cuenta que los factores principales han de ser siempre la exactitud y la claridad metafísicas.
Afiliarse equivale a decir “estoy listo para ayudar”
[Joining is saying, “I'm ready to help”]
Usted puede ser uno de los muchos estudiantes nuevos de Ciencia Cristiana que están agradecidos por curaciones obtenidas y por haber progresado en su comprensión de Dios. Y tal vez haya llegado al punto en que desea ayudar a otros a descubrir qué es lo que ha cambiado la vida de usted tan radicalmente.
Si es así, considere afiliarse a La Iglesia Madre — apoye los esfuerzos que la Iglesia despliega a través del mundo de compartir las posibilidades que ofrece la Verdad.
Lo invitamos cordialmente a solicitar la afiliación. Puede obtener una solicitud en cualquier Sala de Lectura de la Ciencia Cristiana, iglesia filial o Sociedad de la Ciencia Cristiana; de alguien que ya sea miembro de La Iglesia Madre o de algún practicista registrado en el The Christian Science Journal o en El Heraldo de la Ciencia Cristiana. También puede obtenerla escribiendo directamente al Secretario de La Iglesia Madre: Clerk of The Mother Church, The First Church of Christ, Scientist, Christian Science Center, Boston, MA, E.U.A. 02115.
Giros postales internacionales y giros en dólares
[International money orders and dollar drafts]
Para poder servirles mejor, les rogamos que al enviar su giro postal o su giro en dólares a la Sociedad Editora en Boston, además de su nombre y dirección, nos indiquen a qué debemos destinar el envío. Esto nos ayudará a evitar las demoras que causaría el tener que escribirles para preguntarles. Los giros en dólares comprados en el banco del país pueden ser tramitados con más prontitud que los giros postales.
