Antes de jubilarme, trabajaba en una fábrica preparando sustancias químicas relacionadas con la fotografía. En una ocasión estaba agregando ácido sulfúrico a un líquido hirviendo, y la mezcla inesperadamente me saltó a la cara.
Iniciar sesión para ver esta página
Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!