Aunque pertenezco a la segunda generación de Científicos Cristianos, al principio no estudiaba esta enseñanza seriamente. La ayuda mediante la oración que me daba mi madre cuando la necesitaba, la aceptaba sin pensar en ello.
Hace algunos años, por medio de la oración de mi madre, sané rápida y permanentemente de lesiones recibidas en un serio accidente. El dolor, que era insoportable, desapareció en dos horas, y las lesiones sanaron más o menos en un día, sin ningún efecto posterior.
Hace algún tiempo que estudio con sinceridad Ciencia y Salud por la Sra. Eddy, y puedo testificar que un estudio profundo de este libro sí sana. He tenido dos curaciones que se efectuaron únicamente por medio de la lectura de este libro desde el comienzo hasta el final. Relato estas curaciones para animar a otros.
Durante algún tiempo tuve gran dificultad con los ojos. No podía leer por mucho tiempo, ni siquiera estudiar por una hora, porque comenzaban a dolerme los ojos. Ahora, el problema de los ojos sencillamente ha desaparecido. También tenía un problema con una rodilla, pues estaba rígida y no se doblaba como debía. Esto me causaba gran dolor al caminar, y, por supuesto, al correr. El problema de la rodilla también sanó permanentemente. No tengo ningún dolor y puedo doblar la rodilla, caminar y correr con toda libertad. Reitero que las curaciones antes mencionadas se efectuaron únicamente por medio de la lectura de todo el libro Ciencia y Salud por la Sra. Eddy, y no recibí ayuda de ninguna persona.
También me agradaría expresar mi humilde gratitud por mi consagrado maestro de Ciencia Cristiana, y por los desinteresados trabajadores de La Sociedad Editora de la Ciencia Cristiana, que publican nuestras maravillosas publicaciones periódicas que tanto nos ayudan.
Estoy profundamente agradecido a Dios por nuestro Mostrador del camino, Cristo Jesús, y su leal seguidora la Sra. Eddy. Los sacrificios incesantes de nuestra Guía han hecho disponible para nosotros la Ciencia de la Verdad, por medio de su libro Ciencia y Salud. Trato de seguir en todo lo posible los pasos de nuestro amado Maestro, y hacer mi pequeña y humilde parte en favor de esta gran Causa, la cual amo de todo corazón.
Chandigarh, India
