Algunas veces a un practicista de la Ciencia Cristiana se le pregunta si estaría dispuesto a orar por un paciente en caso de que éste deseara confiar tanto en los medicamentos como en Dios para curarse. El practicista se ve obligado a rehusar, pero en ciertas ocasiones se pregunta si el paciente comprende realmente por qué se le negó la ayuda.
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