Sé la irradiación de la Vida y el Amor.
Sé el ánimo divino.
Sé la danza y la canción del Alma;
Dios dice: ¡“Tú eres mío”!
Del número de agosto de 1986 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana
Sé la irradiación de la Vida y el Amor.
Sé el ánimo divino.
Sé la danza y la canción del Alma;
Dios dice: ¡“Tú eres mío”!