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Desinflando globos

Del número de febrero de 1987 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana


Para desinflar la mayoría de los globos, todo lo que necesitas es un alfiler puntiagudo. Un buen pinchazo y —!bum!— todo lo que queda es un pedazo de goma arrugado.

Puede ser que el globo haya sido inflado en ese momento o antes. Pudo haber sido más o menos pequeño o algo grande. Eso no tiene interés para el alfiler ni para la persona que tiene el alfiler. Imagínate que estás parado frente a un globo de helio — un globo bastante grande y que ha durado inflado una semana — con un alfiler pequeño y puntiagudo en la mano, preguntándote: ¿Podrá este alfiler hacer estallar ese globo? es tan antiguo y tan grande.

Bueno, cada palabra de Verdad puede ser como un alfiler puntiagudo para el error La Sra. Eddy usa la palabra “error” para referirse al mal, o a cosas que son materiales y no verdaderas. que tal vez veamos a nuestro alrededor como globos inflados. El temor o las ofensas pueden parecer grandes, quizás hasta parezca que han permanecido por mucho tiempo; pero las verdades espirituales pueden desinflarlas rápidamente. La Biblia dice: “La palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos”. Hebr. 4:12.

¿Cómo podemos estar seguros de esto? La vida de Cristo Jesús nos proporciona ejemplos. Uno de ellos es el relato acerca de la noche en que Jesús y sus discípulos estaban en una barca en el Mar de Galilea. Mientras Jesús dormía, se desencadenó una tormenta. Muy asustados, los discípulos despertaron a Jesús. El sabía que Dios cuida de Su creación, de modo que dijo al mar: “Calla, enmudece”. Marcos 4:39. Y se calmó. Los discípulos quedaron muy impresionados por esto. Jesús habló la verdad, la palabra de Dios.

La Sra. Eddy dice: “Declarad la verdad a toda forma de error”. Ciencia y Salud, pág. 418. Cuando algo trata de hacernos sentir que puede haber a nuestro alrededor gente mala o enfermedades que pueden dañarnos o entristecernos, podemos decir: “No tienes poder, porque Dios es el único poder. Y eso es la verdad”.

Entonces podremos ver que el error desaparece. ¡Veremos que sólo era mucho aire, y nada más!

Grande es el Señor nuestro,
y de mucho poder;
y su entendimiento es infinito...
Cantad a Jehová con alabanza,
cantad con arpa a nuestro Dios.

Salmo 147:5, 7

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