Me gustaría contarles acerca de mi primera experiencia con la Ciencia Cristiana. Hace varios años tuve un fuerte dolor en la espalda y fui a un hospital muy grande en Los Angeles. Los médicos me tomaron radiografías que mostraron que tenía una vértebra dislocada. Ellos dijeron que la columna vertebral se estaba deteriorando y que un nervio estaba oprimido, lo que causaba el fuerte dolor. Ellos pensaron que yo debería ser operada inmediatamente. Yo les dije que lo pensaría, pero no me sometí a la operación. Fui a ver a un quiropedista y me sentí mejor por un tiempo.
En 1986, el dolor empezó de nuevo. Fui a ver a un quiropedista que me recomendó mi compañía de seguros. El dijo que no podía hacer nada para aliviar el dolor. Yo estaba en constante dolor, y solamente podía trabajar medio tiempo a causa del sufrimiento.
Más tarde en aquel año, una amiga vino a visitarme. Cuando le conté sobre este problema, ella me ofreció el libro Ciencia y Salud por Mary Baker Eddy. Al día siguiente empecé a leer este libro. Un día mientras leía, el dolor desapareció. Estaba tan feliz. Tiré a la basura todas las píldoras para el dolor que había estado tomando, y di gracias a Dios.
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