¿A quién no le vendría bien tener más luz? ¿Más claridad en momentos de duda? Y si estamos en medio de nuestra propia búsqueda de luz, a veces ayuda escuchar las experiencias de otros "que sinceramente buscan la Verdad" Ver Ciencia y Salud, pág. xii., como la Sra. Eddy se refiere a ellos. Esta columna publica algunas experiencias que pueden ser útiles a los que están buscando nuevas respuestas.
Los relatos son anónimos, ya que algunas de las personas que participan en esta serie en el pasado tuvieron un estilo de vida y actitudes que difieren de los que ahora valoran. Fue necesario condensar el tiempo en la narración de estas experiencias, las que no intentan contar una historia completa, sino que muestran una amplia gama de buscadores y el camino por el cual la luz del Cristo, la Verdad, restaura, dirige y regenera vidas.
Dejar de beber no es fácil. El uso continuo del alcohol, incluso unos pocos tragos diarios, cambia a una persona. Se tiene poca energía o pensamiento claro. Uno pierde su estimación propia, y lo único que se vuelve importante es tener en la casa la suficiente cantidad de licor como para que alcance durante el fin de semana. Hay mentiras, vergüenza, culpas y situaciones que se ocultan. Y esto continúa día tras día.
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