Skip to main content Skip to search Skip to header Skip to footer

Un Martes Por la mañana me...

Del número de junio de 1994 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana


Un Martes Por la mañana me levanté con dolor de cabeza y con fiebre. Pero no quería faltar a la escuela ese día, debido a que iba a pasar algo en la tarde para lo que había trabajado mucho, y también era el día en que sacaban la foto de toda la clase.

Mi mamá vino a mi habitación y le conté el problema. Inmediatamente empezamos a orar. Oramos para verme como la hija perfecta de Dios, que no está sujeta a la enfermedad. Un pasaje de la Biblia con el que oré fue: “Fíate de Jehová de todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus veredas” (Prov. 3:5, 6). Sabía que Dios es perfecto y no puede estar enfermo. Y debido a que soy el reflejo de Dios, yo no podía estar enferma.

Más o menos una hora más tarde llamé a una practicista de la Ciencia Cristiana. Le dije que estaba enferma, pero que realmente quería ir a la escuela esa tarde. Me preguntó cuanto era dos por dos. “Cuatro”, le respondí. “Correcto, pero ¿qué ocurriría si respondieras cinco?” Le dije que sería incorrecto. Ella dijo: “Exacto; es lo mismo que no te estás sintiendo bien, es sólo un error, tan sólo una creencia. Y puedes probar eso”. Hablamos un poco más acerca del hecho de que es bueno estar en la escuela, entonces era justo que yo estuviera allí.

Iniciar sesión para ver esta página

Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!

Para explorar más contenido similar a este, lo invitamos a registrarse para recibir notificaciones semanales del Heraldo. Recibirá artículos, grabaciones de audio y anuncios directamente por WhatsApp o correo electrónico. 

Registrarse

Más en este número / junio de 1994

La misión del Heraldo

 “... para proclamar la actividad y disponibilidad universales de la Verdad...”

                                                                                                          Mary Baker Eddy

Saber más acerca del Heraldo y su misión.