Un pastor que llega al corazón

Generalmente un pastor está en contacto con algunas de las preguntas y asuntos más íntimos que enfrenta la gente. Hace poco el Heraldo tuvo la oportunidad de hablar con Judith Woyka, C.S.B., de Haddington, Escocia; Michael B. Thorneloe, C.S.B., de sheffield, Inglaterra; y Martyn M. Auret, C.S.B., de Johannesburgo, República de Africa del Sur. Todos ellos han sido durante muchos años practicistas y maestros de la Ciencia Cristiana, y actualmente forman parte del Cuerpo de Conferenciantes de la Ciencia Cristiana.

Quizás debamos comenzar por el principio. ¿Cuál es la función de un pastor?

Michael B. Thorneloe: El significado original de la palabra, de acuerdo con la concordancia de Cruden, es “guía”. La gente piensa en él o en ella como un ministro o líder espiritual que “guía” o atiende las necesidades de una comunidad. Además de conducir los servicios religiosos regulares de la iglesia, un pastor muchas veces es convocado para ocasiones importantes, por ejemplo, para ocuparse de los nacimientos (bautismos), casamientos y muertes.

Martyn M. Auret: Sí, cuando uno observa a su alrededor en la comunidad, uno ve que la función del pastor es nutrir y consolar, o reconfortar, a aquellos que recurren a él. El vela por la educación espiritual de los niños, visita a aquellos que no se encuentran bien, y se une a ellos en oración. Un pastor indica a sus feligreses, a su congregación, que recurran naturalmente a Dios. Los mejores pastores elevan la consciencia de las personas a los valores espirituales, y la apartan de la mera materialidad.

Judith Woyka: Los pastores siempre han ocupado un lugar importante en mi familia. Provenientes de una familia religiosa, protestante, nuestros padres se aseguraron de que conociéramos la Biblia a fondo, y crecí recurriendo siempre a nuestros ministros, deseando encontrar que la vida tuviera sentido. Algunas veces visitaba a estos hombres maravillosos, y a veces ellos visitaban mi casa. Con otros, manteníamos correspondencia.

Como ven, la Biblia era un registro histórico fascinante, pero a mí no me brindaba, en sí misma, las respuestas espirituales metafísicas que tan desesperadamente necesitaba, y estos excelentes pastores tampoco podían hacerlo, aunque habíamos tenido varios intercambios útiles e interesantes. Entonces alguien me dio un ejemplar de Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras por Mary Baker Eddy. Este libro literalmente me abrió las puertas de la Biblia, y finalmente estos dos libros se transformaron en mi pastor. La misma palabra pastor adquirió un nuevo significado. Mi nuevo pastor “vive” en la casa; puedo encontrarlo en todas las habitaciones, y viaja conmigo. Puedo recurrir a este pastor de día y de noche.

Sr. Auret: Esto me recuerda las palabras de Jeremías: “Os daré pastores según mi corazón, que os apacienten con ciencia y con inteligencia”. ^{Jer. 3:15.}

¿Por qué temas recurren las personas a un pastor?

Sr. Thorneloe: La palabra pastor nos da la respuesta. Pensamos en un pastor que guía y vigila su rebaño. El es consecuente en su vigilancia. Un pastor guía su “rebaño” hacia Dios.

Sra. Woyka: Los pastores cumplen una función muy importante en la mayoría de las comunidades. La gente recurre a ellos en busca de consejo, consuelo, aliento e instrucción religiosa. El alejamiento de un pastor de una comunidad puede dejar un enorme vacío. Repentinamente se produce un vacío, y nada puede llenarlo. La llegada de un nuevo ministro quizás produzca contradicciones, al brindar una forma diferente de consuelo. Es por eso que mucha gente busca algo más permanente.

Hace cien años la Sra. Eddy ordenó a la Biblia y a Ciencia y Salud como Pastor de La Iglesia Madre. ¿Cuál creen ustedes que es el significado especial de esto?

Sr. Auret: Al ordenar a la Biblia y a Ciencia y Salud como Pastor de La Iglesia Madre, y de todo el movimiento de la Ciencia Cristiana, la Sra. Eddy elevó el ministerio de la Ciencia Cristiana más allá de las opiniones personales. De esta manera ella garantizó que cada estudiante de la Ciencia Cristiana sea alentado a recurrir a la Biblia y a nuestro libro de texto, Ciencia y Salud para encontrar las enseñanzas verdaderas de Dios y de la relación del hombre con Dios.

Sr. Thorneloe: Antes de esto, se ordenaba como pastores de La Iglesia Madre y de las iglesias filiales a Científicos Cristianos. Algunos eran mejores que otros. He aquí el significado especial de lo que hizo la Sra. Eddy: el carácter consecuente de los libros mismos. Ella descubrió la forma de hacer que quienes los leyeran y escucharan percibieran lo que Dios estaba diciendo. Ella guiaba a todos a la fuente misma de la Ciencia Cristiana. La opinión humana fue eliminada.

Sr. Auret: El primer artículo de fe de la Ciencia Cristiana verdaderamente resume esto, ¿no es así?: “Como adherentes de la Verdad, aceptamos la Palabra inspirada de la Biblia como nuestra guía suficiente hacia la vida eterna”.^{Ciencia y Salud, pág. 497.} Y a medida que nos comunicamos con nuestro Pastor por medio del estudio y la oración, pronto encontramos que nuestro libro de texto, que acompaña a la Biblia nos capacita para descubrir “la Palabra inspirada” de las Escrituras. Descubrimos que recurrir diariamente a nuestro pastor, o trabajar con él, cada día es una aventura excitante. Y, por supuesto, lo maravilloso es que podemos tener a nuestro Pastor con nosotros ¡en todo momento! No necesitamos separarnos de nuestros libros, y de ese modo cultivamos una relación entrañable con nuestro Pastor. No tenemos que hacer una cita previa para verlo, ni tenemos que visitarlo sólo los domingos.

¿Es realista pensar que los libros pueden bablar tan eficazmente como una persona sobre las necesidades de la gente?

Sr. Thorneloe: Por supuesto que sí, y son aún más eficaces. Estos libros nos muestran que Dios es Amor, y nos capacitan para demostrarlo. Hablan de curación. De hecho, el último capítulo de Ciencia y Salud se titula “Los frutos de la Ciencia Cristiana”. Incluye curaciones que se han producido por medio de la lectura de Ciencia y Salud.

Sra. Woyka: La Palabra de Dios, de la que hablan estos dos libros, es infalible, y, por lo tanto, satisface inevitablemente las necesidades de las personas más ciertamente de lo que puede hacerlo un ministro humano, por más bien intencionado que sea.

Sr. Thorneloe: Esto me recuerda una mujer que me habló recientemente y me dijo que cuando le presentaron la Biblia y Ciencia y Salud por primera vez, sintió que en ese momento no necesitaba un pastor. Ella guardó los libros (su pastor) en un armario. Varios años después, ella necesitó de su pastor, ¡y él la estaba esperando! ¡Dudo que cualquier pastor personal la hubiera esperado todo ese tiempo en un armario oscuro! Esto fue para ella, y puede serlo también para nosotros, una demostración de la eterna disponibilidad del Consolador.

¿Qué nos dice la Biblia sobre la función que cumple un pastor? ¿Qué clase de pastor se nos promete en la Biblia?

Sr. Thorneloe: Lo que nos viene inmediatamente al pensamiento es el Salmo 23. Este es uno de los lugares en le Biblia en que se habla de Dios como el “pastor”. Allí dice: “Jehová es mi pastor; nada me faltará”. A través de nuestro Pastor aprendemos que todas las necesidades del hombre son satisfechas. Ciencia y Salud lo dice de esta manera: “El Amor divino siempre ha respondido y siempre responderá a toda necesidad humana”.^{Ibid., pág. 494.}

Estó es lo más maravilloso de nuestro Pastor. Nunca expresa una especulación meramente humana, sino que nos revela la realidad espiritual de la creación. Nos dice lo que es, y no simplemente lo que nosotros desearíamos que fuese.

Jesús habló sobre el Consolador en cuatro ocasiones, en los capítulos del Evangelio según Juan que contienen el último sermón que dio a sus discípulos. Por ejemplo, allí dijo que este Consolador permanecería con nosotros para siempre (véase 14:16).

Sr. Auret: ¡Siento tanto respeto e inspiración cuando pienso que la venida del Mesías, Cristo Jesús, fue profetizada en la Biblia casi mil años antes! Después de la crucifixión y la resurrección, los discípulos se sentían inseguros sobre su futuro, y se preguntaron si todo estaba perdido. Es significativo que después de que el Maestro les había explicado, había despertado su pensamiento a la realidad de que había cumplido con la profecía, ellos comprendieron más completamente lo que él les había enseñado y demostrado durante sus tres años de ministerio. Fue entonces cuando ellos fueron verdaderamente capaces de seguir adelante y de establecer la Iglesia cristiana.

Poco tiempo antes de su crucifixión, Jesús prometió a sus discípulos: “Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre os enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho”. ^{Juan 14:26.}

Es solo a medida que usted y yo trabajamos con nuestro Pastor, crecemos en nuestra comprensión de Dios y de Su Cristo, y de la relación del hombre con Dios, y experimentamos la curación por medio de la oración, que comprendemos que la Ciencia divina es el Consolador. La profecía del Maestro se ha cumplido. Esto no es algo que podemos decirle a alguien tan fácilmente. Es una verdad que tiene que ser descubierta por cada uno de nosotros, y entonces percibimos la autoridad de las enseñanzas que estableció nuestro pastor.

Algunos opinan que la función principal de un pastor es alimentar. ¿Qué clase de alimento espiritual busca la gente? ¿Cómo satisface el pastor sus necesidades?

Sr. Thorneloe: Martyn mencionó la profecía de Jeremías: “Y os daré pastores según mi corazón, que os apacienten con ciencia y con inteligencia”. La palabra pastor deriva de la misma palabra en latín —pascere, que significa “alimentar” — como pastura. ¿Qué clase de alimento espiritual buscan las personas? He encontrado personas en diferentes comunidades, especialmente cuando he efectuado giras de conferencias, que me demostraron que están buscando conocer o comprender lo que Dios verdaderamente es, como una base para satisfacer sus necesidades. Por ejemplo, me entrevisté con personas procedentes de sectores necesitados de la comunidad en la Ciudad de Kansas, y en la ciudad de Washington. Les pregunté cuál era su necesidad fundamental para resolver sus dificultades, y en ambas comunidades la respuesta fue “Dios”. Las personas buscan comprender a Dios, en primer y último lugar. Nuestro Pastor les permite hacerlo. Los tres primeros Mandamientos, el Padre Nuestro, y las primeras preguntas en el capítulo “Recapitulación” de Ciencia y Salud, se refieren a la naturaleza de Dios. “Recapitulación” también presenta el mensaje bíblico de que el hombre es el reflejo o la imagen de Dios, y de que la omnipotencia de Dios satisface todas sus necesidades (incluso la buena salud).

Para algunos, el concepto de un “pastor impersonal”, de recurrir a libros en lugar de a un ministro experimentado, resulta frío e insensible. A las personas les gusta conversar con alguien cuando se sienten muy desalentadas. ¿Cómo satisface nuestro Pastor las necesidades humanas?

Sr. Thorneloe: El pastor que habla constantemente acerca del amor que Dios tiene por el hombre, no puede ser frío e insensible. El Salmo 23, que ya mencioné anteriormente, habla del amor de Dios hacia el hombre. En Ciencia y Salud la Sra. Eddy muestra que la palabra Señor en este contexto significa “Amor”: El Amor es mi pastor; en lugares de delicados pastos el Amor me hace descansar. ^{Véase Ciencia y Salud, pág. 578.} El Amor me guía constantemente, porque el Amor es mi compañero siempre presente. Hay muchos relatos en el Antiguo y en el Nuevo Testamento que nos muestran que Dios cuida constantemente del hombre.

Sr. Auret: Como Michael acaba de decir, a menudo lo que las personas más necesitan es saber que Dios los ama, que no tienen que temerle a Dios, y que son amados y dignos del amor de Dios. En el Padre Nuestro encuentro una enorme fuente de consuelo. Piensen en alguien que ora por primera vez y conoce a Dios como nuestro Padre “que [está] en los cielos”. Y que acepta la interpretación espiritual de estas palabras, dada en Ciencia y Salud: “Nuestro Padre-Madre Dios, del todo armonioso”.^{Ibid., pág. 16.} Esta oración en su totalidad nos da la base para un tratamiento completo, y sana.

Sr. Thorneloe: La Biblia y Ciencia y Salud nos demuestran que son importantes. Sin prueba, la religión está muerta. Nosotros podemos demostrar que lo que nos enseña nuestro Pastor es correcto. Por lo tanto, la religión está viva. Mi esposa conoce a una persona que sólo asiste ocasionalmente a nuestros servicios porque no tenemos un ministro. Esto exige mucho de nosotros. ¿No sugiere esto que necesitamos creer en el Cristo de manera tal que esta visitante vea y sienta verdaderamente la importancia que tiene el pastor en nuestra vida, que nos trae esperanza, gozo y curación, la presencia e influencia misma de Dios con nosotros?

Sra. Woyka: Cada vez que he escuchado sin reservas a nuestro pastor dual, tarde o temprano, he encontrado el camino que debía seguir Cuando recibimos las respuestas, son muy completas.

¿Recuerdan el Himno que comienza con estas palabras: “Contar la historia quiero”? La Sra. Eddy lo incluyó en un mensaje de Comunión a La Iglesia Madre en 1904. Una de sus estrofas dice:

Esto es lo que el Pastor nos brinda constantemente: la importante historia de “Jesús y de su amor”. Quizás tengamos un amigo o un confidente con el cual podamos hablar, pero ellos no están disponibles en todo momento. A veces sentimos un vacío cuando ellos se van. Pero el Pastor, mi amigo más permanente, la Biblia y Ciencia y Salud, está siempre allí; nunca se aleja.

¿Puede un solo pastor satisfacer necesidades de alcance universal, puede atender eficazmente a la gente en Africa, Australia, Asia, Sudamérica, Europa y Norteamérica al mismo tiempo? ¿Puede un pastor atender eficientemente tanto a quienes han recibido una educación superior como a los ignorantes, a los ricos y a los pobres, a las áreas urbanas y rurales, a los niños; a los adolescentes, a los profesionales y a los jubilados?

Sr. Auret: Sí, nuestro pastor puede llegar eficazmente a todos. Piensen en la Bienaventuranza: “Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados”. ^{Mateo 5:6.} Cualquiera sea nuestra posición en la vida, la Verdad está allí para todos nosotros. Los testimonios publicados en nuestras revistas y relatados en nuestros programas radiales de onda corta, confirman esto plenamente.

Sra. Woyka: Oh, así es. El lenguaje del Espíritu, la nueva lengua ilustrada en el relato de Pentecostés, es universal. Nuestro pastor puede ayudar a todos porque el mensaje mismo es infinito, ilimitado y, como tal, satisface toda necesidad. Habla directamente al corazón. Cuando la Palabra de Dios llega al corazón, vemos cómo Su Palabra lo renueva todo. Podemos sentir Su presencia. Ya sea que para el mundo seamos instruidos o ignorantes, ricos o pobres, enfermos o sanos, la Palabra de Dios nos alcanza a todos. El pastor nos conduce y nos guía. Nadie necesita un intermediario; el pastor nos ayuda a todos.

Sr. Auret: Y pienso que esto significa que un Científico Cristiano tiene el deber sagrado de compartir su comprensión de Dios y del hombre, y de presentar el pastor a otras personas. Este es un rasgo de la compasión que Jesús ejemplificó. El señaló los dos grandes mandamientos. El segundo nos dice que amemos a nuestro prójimo como a nosotros mismos. En cuatro lugares en el libro de Juan encontramos que Jesús dijo a sus discípulos que debían amarse los unos a los otros. De hecho, él dijo que si querían ser sus discípulos, tenían que amarse los unos a los otros.

Simplemente tenemos que tener en cuenta estas demandas, no sólo en nuestras actividades diarias, sino también en nuestra oración diaria por la humanidad. Es necesario incluir a toda la humanidad en el amor de Dios, estar conscientes del amor de Dios, reconocerlo, exigirlo para todos.

Sr. Thorneloe: Sí, Moisés compartió lo que Dios le reveló. También lo hicieron los profetas y los primeros seguidores de Jesús. The Young Church in Action (La nueva Iglesia en acción), como J. B. Phillips tituló su traducción de “Los Hechos de los Apóstoles”, o “Algunos Hechos de los Apóstoles”, como podría traducirse del griego, muestra que la iglesia se comprometió a compartir lo que sabía sobre el amor de Dios por el hombre. Ya sea que vivamos en Africa, Europa, Sudamérica, o en cualquier lugar del mundo, podemos sentir el poder de la Palabra de Dios.

Cuando una de mis hijas era muy pequeña, la escuché hablando con una de sus hermanas sobre las verdades que había aprendido del pastor, y aquella fue sanada. He sido testigo de una curación de glaucoma cuando un adulto compartió con otro las verdades de la Biblia que él conocía. La edad, la raza y la educación no hacen ninguna diferencia.

Volvamos al Salmo 23. Cada individuo sobre la faz de la tierra puede reconocer que “El Señor es mi pastor”, y por medio de la Biblia y de Ciencia y Salud aprender diariamente acerca de la perfección del hombre como idea de Dios.