Cierto Día, Poco después que comencé a estudiar seriamente la Ciencia Cristiana, me enfermé de gripe. Por la mañana leí la Lección Bíblica detallada en el Cuaderno Trimestral de la Ciencia Cristiana y me llamó la atención el siguiente versículo de la Biblia: “Así dice Jehová: De balde fuisteis vendidos; por tanto, sin dinero seréis rescatados”. Isa. 52:3.
En ese entonces, por la noche mi rutina era bañar a los niños, leerles una sección de la Lección y un cuento a la hora de acostarse, después de lo cual acostaba en la cama al bebé de dos años, y ayudaba a mi hijo de seis años con sus deberes de la escuela. Esa noche, no obstante, me sentía demasiado mal para bañar a los niños. Después de dilatar esa tarea por algunos minutos, pensé para despertarme: “Por lo menos léeles la Lección”.
En la lección que leí se encontraba el versículo citado. Nuestro hijo entonces me preguntó: “Mami, ¿qué significa ese versículo?” En realidad no sabía, de modo que medité sobre él para contestarle. De pronto lo comprendí. Al aplicarlo a mí misma, percibí que me había vendido a la creencia de gripe sin obtener nada bueno al hacerlo, y percibí a la vez que sería rescatada por mis riquezas espirituales, es decir, las verdades que estaba aprendiendo en la Ciencia Cristiana.
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