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De la Oficina de la Editora de los Escritos de Mary Baker Eddy

La promoción, el cristianismo y la Ciencia Cristiana

Del número de abril de 1997 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana


Uno De Los temas que provocan mucha discusión entre los cristianos y otras comunidades religiosas en la actualidad, se resume apropiadamente en el título de un artículo que apareció hace poco en la revista U.S. News and World Report;U.S. News & World Report, 13 de marzo de 1995. "¿Se pierde a Dios cuando aumentan las ventas?" Esta discusión plantea el interrogante de si la promoción es realmente compatible con el cristianismo y con la Ciencia Cristiana.

Tanto los medios de comunicación como algunos Científicos Cristianos se sorprendieron mucho cuando la Iglesia de Cristo, Científico, abrió sus puertas al mundo lanzando una nueva edición del libro de texto de la Ciencia Cristiana, Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras escrito por Mary Baker Eddy. Los medios de comunicación se sorprendieron porque por muchos años han escuchado relativamente poco acerca de la Iglesia, a excepción del enjuiciamiento de padres Científicos Cristianos por haber confiado en la oración para la curación física de sus hijos. Y algunos Científicos Cristianos se sorprendieron porque encuentran difícil reconciliar tales actividades promocionales con su concepto acerca de lo que es la Iglesia de la Ciencia Cristiana. Como en otras denominaciones religiosas, algunos miembros consideran que al abrirse de tal modo al mundo, la Iglesia ha adoptado políticas mundanas y en consecuencia ha diluido la pureza de la religión. Este artículo considera que se puede llegar a un acuerdo sanador sobre este tema.

El origen latino del verbo promover indica que significa simplemente mover algo hacia adelante. Considerada de esta manera, la promoción simplemente significa mover hacia adelante una cosa.

La Biblia aclara muy bien qué es la promoción. El salmista habla sobre el error de tener un concepto equivocado de la promoción, así como la base perdurable de tener un sentido correcto de lo que es la promoción, como sigue: "Dije a los insensatos: no os infatuéis; y a los impíos: no os enorgullezcáis; no hagáis alarde de vuestro poder; no habléis con cerviz erguida. Porque ni del oriente ni del occidente, ni del desierto viene el enaltecimiento. Mas Dios es el juez; a éste humilla, y a aquél enaltece". Salmo 75:4–7.

¿Qué es la promoción desde el punto de vista religioso?

De acuerdo con este pasaje, la arrogancia, la jactancia y el engrandecimiento personal caracterizan a la promoción canalizada por el camino equivocado. Esta clase de promoción es autopromoción, es elevarse a uno mismo, así como a las opiniones y juicios personales. Un comentario bíblico afirma que si la promoción no viene del oriente, del occidente ni del sur, entonces debe venir del norte, que Isaías caracteriza como la morada del trono de Dios. Véase Isa. 14:13. Véase también Salmo 75:6, The Companion Bible, pág. 793. La aguja que apunta hacia el Polo Norte ¿acaso no simboliza el gobierno omnímodo del Dios que es totalmente bueno, la fuente de toda promoción eficaz? El salmista dice "Dios es el juez", indicando la preeminencia de la ley divina en el asunto tanto de la promoción como de su opuesto. Es prudente y correcto confiar todo asunto concerniente a la promoción o avance, al movimiento de la energía divina no a las opiniones humanas.

Un corto versículo en el Nuevo Testamento indica la base de toda verdadera promoción, y el gran impulso que nuestro Maestro, Cristo Jesús, dio a la consciencia humana durante los tres años de su ministerio: "Y Jesús volvió en el poder del Espíritu a Galilea". La acción humana de Jesús de volver a Galilea se produjo en un estado concreto y positivo, "en el poder del Espíritu". Las concordancias de la Biblia nos dicen que estas palabras indican que en esta acción humana de regresar, Jesús permanecía mentalmente en el poder inherente, la habilidad natural, el dinamismo del Espíritu, Dios, con un sentido de apoyo y continuidad en el Espíritu, teniendo aquel "poder del Espíritu" como su lugar sagrado, su único espacio y su única esfera de acción. Y ¿cuál fue el resultado de este movimiento hacia adelante basado en el Espíritu y en el ambiente del Espíritu? "... y se difundió su fama por toda la tierra de alrededor". Lucas 4:14. La promoción "en el poder del Espíritu" ¡tiene resultados grandiosos y de gran penetración!

Más adelante en el Nuevo Testamento, el autor del segundo capítulo de los Hechos describe un día de gran avance en la Iglesia primitiva, "y se añadieron en aquel día como tres mil personas" a la Iglesia: "y perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón, alabando a Dios, y teniendo favor con todo el pueblo". Aquí también el trabajo de promoción fue acompañado por la acción; los discípulos continuaban "unánimes cada día en el templo"; partían el pan de casa en casa, alababan a Dios y tenían el favor de todo el pueblo. El autor continúa su relato, indicando la fuente eficaz de esta promoción para la Iglesia: "Y el Señor añadía cada día a la iglesia los que habían de ser salvos". Hechos 2:46, 47. "Y el Señor añadía cada día a la iglesia.. ." Dios, el Espíritu divino, es la fuente de todo movimiento de avance en Su Iglesia.

La Historia Del Cristianismo demuestra que siempre ha habido movimiento, períodos de retroceso como la Edad del Oscurantismo y períodos de progreso como la Reforma. ¿Qué es lo que movió al cristianismo hacia adelante en cada fase de progreso y lo está moviendo hacia adelante hoy en día? Es el mismo impulso divino que hizo avanzar a los profetas, que movió a Jesús y movió la Iglesia primitiva, es el Cristo, la idea espiritual de Dios. A través de las épocas este Cristo, el poder de Dios en acción, ha impulsado todo avance del pensamiento, disipando los conceptos teológicos materialistas, sanando a los enfermos y destruyendo las equivocaciones y errores de un pasado más limitado. El trabajo pionero de traducción de William Tyndale y la publicación subsecuente de la versión King James de la Biblia, que hizo la Biblia más accesible a la humanidad, son ejemplos sobresalientes de acciones humanas decisivas que expresan el poder de avance del Cristo en la consciencia humana. El Cristo siempre ha revelado y está revelando ahora, la idea espiritual de la existencia y la sustancialidad de Dios como Principio divino. El Cristo está guiando al cristianismo de hoy para que acepte que Dios es el único poder establecido aquí mismo. La manifestación espiritual de Dios — o sea, Su Cristo — viene a la carne en la experiencia de la humanidad en todo momento, destruyendo las aberraciones y desviaciones del engrandecimiento personal, que pretendería esconder de la vista humana la omnipotencia de Dios.

¿Por qué progresó el cristianismo?

¿Y exactamente dónde encaja la Iglesia de la Ciencia Cristiana en el movimiento progresista del cristianismo? El título que le dio la Sra. Eddy a su Iglesia revela la respuesta; la llamó "Iglesia de Cristo, Científico". Por primera vez en la historia, ese Cristo, impulsando el movimiento de avance, la energía eficaz del cristianismo, ha sido puesto en relación con la Ciencia, con la ley de Dios. El movimiento hacia adelante, la promoción, se considera por primera vez como una ley de Dios, a la cual el Espíritu divino le da poder, la Vida divina le da la vitalidad y el Amor divino le da la energía. En este contexto, se ve la promoción como el movimiento de avance irresistible que emana de Dios y procede de Su naturaleza infinita e ilimitada. Desde la época en que ella era la única Científica Cristiana en la superficie de la tierra, hasta los años posteriores en que fue la Guía de un movimiento religioso mundial con publicaciones diarias, semanales, mensuales y trimestrales, la vida humana de la Sra. Eddy se caracterizó por el avance que surgía de su convicción de que la ley de Dios tiene un irresistible poder de penetración y perspicacia. Cuando ella estableció la Iglesia que publica esta revista, la Sra. Eddy no fundó la iglesia "inactiva" de la Ciencia Cristiana, sino el "movimiento" de la Ciencia Cristiana, un movimiento basado en la comprensión demostrable del poder promotor del Cristo, Científico.

Una de las acciones de promoción más memorables que realizó la Sra. Eddy fue la de fundar la primera de las publicaciones de su Iglesia, The Christian Science Journal. Al escribir sobre los antecedentes de esta fundación en su autobiografía, Retrospección e Introspección, ella dice: "Por muchos años sucesivos me he esforzado por encontrar nuevos medios y arbitrios para la promoción y expansión de la curación científica por la Mente, procurando ampliar sus cauces y, de ser posible, levantar un seto a su derredor que proteja sus perfecciones contra las influencias contaminadoras de aquellos que tienen una pequeña porción de su letra y menos de su espíritu".Retrospección e Introspección, pág. 52. La publicación de la primera edición del Journal en abril de 1883 fue uno de los "nuevos medios y arbitrios para la promoción y expansión de la curación científica por la Mente", e indicó que ella tenía toda la intención de dar los pasos humanos necesarios cuando Dios le señalara el camino. Quince años después, esta misma motivación resultó en que ella formara La Sociedad Editora de la Ciencia Cristiana, los negocios de la cual, entre ellos el Journal, debían ser conducidos, ella escribió: "Sobre una base estrictamente cristiana, para la promoción de los intereses de la Ciencia Cristiana".Manual de La Iglesia Madre, Art. XXV Sec. 1. Aquí no había ninguna inclinación de su parte hacia la arrogancia, la jactancia ni la exaltación personal. Lo que su Sociedad Editora iba a promover, o mover hacia adelante, en ese entonces lo mismo que ahora, son "los intereses de la Ciencia Cristiana" — y los intereses pueden definirse como aquellas cosas que realmente producen una diferencia — y esta promoción tenía que hacerse y se hace "sobre una base estrictamente cristiana".

¿Qué móvil impulsa la promoción?

El movimiento de avance, o promoción, es esencial para el cristianismo y para la Ciencia Cristiana cuando el Cristo está al timón del pensamiento. Así la tarea cristiana de promoción siempre tiene que incluir la acción del Cristo, el poder que le da el Espíritu divino, la vitalidad que le da la Vida divina y la energía que le da el Amor divino, para que sea pura, ordenada, clara y, sobre todo, sanadora. En una ocasión, cuando la Sra. Eddy sintió que la propuesta de un estudiante para promover su libro de texto, Ciencia y Salud, era impulsado por móviles cuestionables, la condenó con firmeza. Escribió en una carta en 1893: "De ninguna manera permito que Ciencia y Salud se utilice solamente para conseguir ventas. Jamás lo he consentido. El deseo de obtenerlo debe venir de otra forma... Que Dios nos dé a mí y a usted la gracia para hacer Su voluntad no la nuestra". Carta de la Sra. Eddy al Sr. John Stewart y a su esposa, 17 de junio de 1893 (Departamento de Historia de La Iglesia Madre). Pero ella sí alentó la promoción y la venta de su libro cuando los pensamientos de sus seguidores eran impulsados por el deseo de compartirlo con el fin de sanar los pesares de la humanidad. Por ejemplo, ella les dio instrucciones en el Journal de marzo de 1897: "La Biblia, Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras y mis otras obras publicadas, son los únicos instructores adecuados en esta época. Sera deber de todos los Científicos Cristianos hacer circular y vender la mayor cantidad de libros que les sea posible".Journal, Marzo de 1897, pág. 575.

Una declaración sobre promoción en el Manual de la Iglesia de La Primera Iglesia de Cristo, Científico, aunque dirigida a los Científicos Cristianos, puede ser adecuada para que todos los que aman a Dios la adopten. La Sra. Eddy escribe allí que los Científicos Cristianos: "deberán esforzarse por promover el bienestar de toda la humanidad demostrando las reglas del Amor divino".Manual, Art. VIII, Sec. 16. De esto se desprende con claridad que todo trabajo de promoción verdaderamente cristiano, aunque parezca tratarse de la promoción de un libro, la promoción de un acontecimiento, la promoción de un producto o hasta la promoción de una religión, nunca es realmente ninguna de estas cosas. El móvil y la base genuinamente cristianas para la promoción es 'promover el bienestar de toda la humanidad". Y ¿cómo llevan a cabo las personas, incluso los Científicos Cristianos, esta promoción pura, desinteresada, altruista o movimiento hacia adelante en pro del bienestar de la humanidad? Reconociendo que este movimiento de avance está autorizado solamente por el Espíritu divino, vitalizado sólo por la Vida divina, y movido sólo por la energía del Amor divino. Éste es el modo de demostrar "las reglas del Amor divino" al avanzar — y promover — el bienestar de la humanidad.

La Sra. Eddy resume acertadamente para todos el punto de partida, el móvil, los medios y el efecto de esta actividad sagrada: "El hombre vive, se mueve y tiene su ser en Dios, el Amor. Entonces el hombre debe vivir, no puede morir; y el Amor debe necesariamente promover y formar parte integral de todo su éxito. Hay dos cosas de las que el destino no puede despojarnos; a saber de escoger lo mejor y de ayudar a otros a escoger de la misma forma. Pero al hacer esto, el Maestro se convirtió en siervo. El grande debe inclinarse ante lo servil. Casi no hay afrenta que yo no haya soportado por la causa del Cristo, la Verdad; y he devuelto bendición por maldición. Los mejores ayudan a los peores; los justos sufren por los injustos; y es por este espíritu que Dios gobierna".The First Church of Christ, Scientist, and Miscellany, págs. 164–165.


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