Clara y Alejandro van corriendo a la cocina. Le quieren hacer una broma a Papá. Comieron huevos pasados por agua, y pusieron una cáscara vacía dada vuelta en una huevera, para hacerle creer que es un huevo entero. Ésta no es la primera vez que le hacen una broma a su Papá.
Pero, hoy, Papá no se ríe. Está triste.
—Chicos, váyanse a dormir —les dice—. El departamento es demasiado pequeño para todo este ruido. ¡Vamos, es tarde!
Clara y Alejandro se van a su cuarto. La Mamá viene a darles el beso de las buenas noches.
—Papá está enojado con nosotros —dice Clara.
—Porque hacemos demasiado ruido—agrega Alejandro.
Mamá les asegura: — Papá los quiere mucho. Pero está muy preocupado porque va a perder su empleo.
—¿Podemos ayudarlo? — pregunta Alejandro.
—Por supuesto —dice la Mamá—. ¿Qué han aprendido en la Escuela Dominical que pueda ayudarlo?
—Que Dios es Amor — dice Alejandro.
—Siempre nos cuida y protege —exclama Clara—. Entonces no podemos sentirnos temerosos.
Con la ayuda de su Mamá, Clara y Alejandro buscan algunos mensajes de Dios en la Biblia y en Ciencia y Salud, para ayudar a su Papá. Piensan en estos mensajes antes de dormirse.
Al día siguiente, Clara tiene una idea.
—¿Qué te parece si le damos una sorpresa a Papá? ¡Podríamos escribir algunas palabras en pedacitos de papel con las ideas que Dios nos dió en la Biblia. Y los podemos esconder en diferentes lugares para que Papá los encuentre!
—¡Qué buena idea! — exclama Alejandro.
Y eso es lo que hacen Alejandro y Clara.
A la mañana siguiente, cuando Papá se va a afeitar, ¿qué es lo que encuentra en el espejo del baño?
Este pequeño mensaje de la Biblia:
“Jehová es mi Pastor; nada me faltará”.
Él medita un poco sobre este mensaje, y sabe que puede confiar en que Dios cuida de su familia.
Antes de salir al trabajo, Papá mete la mano en el bolsillo de su pantalón, y encuentra un pedacito de papel con otro mensaje de la Biblia que dice:
“A sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos”.
Escucha el mensaje en silencio, y siente que la presencia de Dios los ama y protege.
Y esa noche, cuando Papá abre su servilleta durante la cena, cae un pedazo de papel en su plato con las siguientes palabras de la Biblia:
“Dios es Amor”.
Papá esboza una enorme sonrisa. Abraza muy fuerte a Alejandro y a Clara.
—Sus mensajes y oraciones me están ayudando mucho. Mamá y yo también estamos orando. Y todos sabemos que Dios siempre cuida de Sus hijos —dice él.
Pocas semanas después, Papá tiene una sorpresa para todos. Ha encontrado un nuevo trabajo, y muy bueno por cierto. Todos se van a mudar a un departamento más grande, donde Alejandro y Clara van a tener cada uno su propia habitación.
Alejandro y Clara ahora saben que nadie es demasiado pequeño para orar. Todos pueden oír los mensajes de Dios, que nos hablan de Su amor perfecto. Y estos mensajes sanan todo.
Nota: Clara y Alejandro encontraron sus mensajes sanadores en los siguientes libros:
“Jehová es mi Pastor; nada me faltará”, es del Salmo 23 en la Biblia.
“A sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos”, se encuentra en el Salmo 91.
Y “Dios es Amor”, se encuentra en la Biblia (1 Juan 4:8), y en Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras, por Mary Baker Eddy (por ejemplo en las páginas 2, 6 y 42).
