Skip to main content Skip to search Skip to header Skip to footer

Seguridad en un mar borrascoso

Del número de diciembre de 2001 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana


Hace Unos Años, cuando mis hijas eran pequeñas, solíamos pasar las vacaciones en una playa aislada y lejana. Para llegar a ese lugar, había un solo camino y no estaba pavimentado. Un día, el camino estaba peor que de costumbre y decidimos ir en bote. Dejamos el automóvil en un poblado pequeño y nos fuimos en un simple bote de pesca de madera, con motor y sin toldo. Éramos seis personas, además del botero y llevábamos suficiente equipaje y comida para dos semanas. Eso hacía que el bote estuviera muy pesado. Era un viaje de unas dos horas y el día estaba gris y lluvioso.

Íbamos hacia el sur a través de un estrecho que está situado entre la costa y una isla. Pasada esa isla, estaríamos en océano abierto, antes de llegar a la protección de otra isla más pequeña, un poco más al sur. En esa parte del viaje, el viento proveniente del océano se volvió muy fuerte y enormes olas comenzaron a cubrir el bote. Resguardamos a las niñas con una lona. La situación fue empeorando y el botero estaba muy preocupado porque el bote estaba sobrecargado. Mi cuñado comenzó a culparse a sí mismo por haber venido en el bote.

Como lo hago usualmente, yo había orado antes de empezar el viaje, afirmando que Dios gobernaba todo y que estábamos sostenidos y guiados por Él. En ese momento estaba orando con todas mis fuerzas para darme cuenta con claridad de que no existía un poder contrario al gobierno omnipotente de Dios. Declaré que todos éramos ideas espirituales, creados a imagen del Espíritu, Dios. No estábamos a merced del viento y el agua. Una idea espiritual no puede ser atacada por fuerzas materiales. Oré sin cesar pero la situación no mejoró y muchas veces el bote estuvo a punto de zozobrar a causa del viento y las olas.

Iniciar sesión para ver esta página

Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!

Para explorar más contenido similar a este, lo invitamos a registrarse para recibir notificaciones semanales del Heraldo. Recibirá artículos, grabaciones de audio y anuncios directamente por WhatsApp o correo electrónico. 

Registrarse

Más en este número / diciembre de 2001

La misión del Heraldo

 “... para proclamar la actividad y disponibilidad universales de la Verdad...”

                                                                                                          Mary Baker Eddy

Saber más acerca del Heraldo y su misión.