Los noticieros hablan sobre la explotación de niños que existe en América Latina, India, Pakistán, África y el Sudeste de Asia. El número de niños que no tienen hogar o son maltratados parece increíble y nulas nuestras posibilidades de ayudar. Aun así, en Venezuela, un grupo de personas decidió desafiar la suposición de que nada se podía hacer, y como resultado surgió la Asociación Ayuda a un Niño.
, abogada que vive en Venezuela, hace poco conversó con sobre su trabajo en esta institución.La Asociación Ayuda a un Niño está compuesta por un grupo de mujeres de todas partes del mundo que ahora viven en Venezuela. Comenzamos estableciendo una casa para niños de la calle. Ahora tenemos seis casas. En este país, la necesidad de tener este tipo de viviendas es muy grande, y los niños responden muy rápido al amor y al cuidado que allí reciben.
También se trabaja en los barrios pobres, hablando con la gente. En ocasiones, la simple orientación es pieza clave para solucionar muchos problemas. Los niños que viven en estas casas vienen de las más dispares y, en ocasiones, las más terribles situaciones. Pero siempre es necesario indagar cualquier lazo familiar que tengan e intentar la reinserción del menor nuevamente a su familia. Muchas veces no hay familiares o realmente es mejor para el niño no volver al lugar de donde salió, pero en otras ocasiones esta reinserción es posible y los resultados son muy positivos, no sólo para el niño sino para todo el grupo familiar.
Iniciar sesión para ver esta página
Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!