Así fue en el principio cuando la Mente habló,
y en la tierra sin forma, la forma apareció,
Escritos Misceláneos, pág. 280.y la flor su exquisita corola desplegó.
Cuando la Mente habló en el universo surgió
toda bondad y gracia, toda forma y color,
y el suave movimiento del ave bajo el sol.
Y con un sólo mandato a los mundos lanzó
a girar en las órbitas infinitas de Dios,
y a la ola impetuosa su límite marcó.
Mas cuando con voz silente dio a Su amor expresión,
con ternura inefable sobre el hombre volcó
poder, majestad y gloria,
la esencia misma del Amor.
Y al concluir así Su obra vio todo en perfección,
contempló a Sus criaturas objeto de Su amor,
las llamó una a una, a todas las nombró,
y entonces, satisfecha, ¡la Deidad se sonrió!
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