Querido Lector:
Recibimos esta nota: “Realmente parece como si nunca pudiéramos hacer todo lo que debemos hacer [incluso leer las revistas de la Ciencia Cristiana]”. ¿Te resulta conocido? Con una lista diaria de cosas por hacer, ¿nos resulta difícil hacer un lugar para un poco de nutrimento espiritual?
Todas las cosas que pensamos que necesitamos lograr a veces hacen que las actividades espiritualmente prometedoras —tal como leer una revista de la Ciencia Cristiana— se transformen en una carga. El preguntarnos: “¿Por qué me encantan las revistas de la Ciencia Cristiana?” cambia drásticamente ese sentimiento abrumador. Lo que nos gusta de ellas guiará cuánto leemos. Ya sea un poco o un montón, lo haremos por amor.
El bien que contienen estas páginas es lo que nos atrae. ¿Qué podría ser mejor que gente común relatando lo que el poder del Cristo, la Verdad, ha hecho por ellas? ¿O escuchar las buenas nuevas que Jesús enseñó: “El reino de Dios dentro de ustedes está” (Lucas 17:21, KJV)? ¿O bien, encontrar una verdad espiritual que te apoye cuando enseñas a los niños?
La fundadora de las revistas de la Ciencia Cristiana conocía el poder de las ideas que se comparten aquí. Mary Baker Eddy también amaba a los lectores de nuestras revistas, dondequiera que estuvieran en el mundo. En uno de los primeros Christian Science Journal, ella elogió un editorial de la siguiente manera: “Quiera el espíritu del Cristo que aquél refleja reposar sobre los amados lectores, y proyectar sobre la página la luz del discernimiento, así como el amanecer, al encender sus glorias en el oriente, ilumina el paisaje terrenal” (Escritos Misceláneos 1883–1896, pág. 313).
A veces encuentro verdaderas joyas en artículos que al principio no me habían llamado la atención. Por ejemplo, un artículo escrito por el propietario de un negocio —algo que yo no soy— podría hablarme directamente sobre mi necesidad de recurrir a Dios, la Mente, cuando tomo decisiones personales. Y luego ese mismo mensaje de la Mente como la fuente de la sabiduría podría ayudar a un amigo a orar para solucionar un bloqueo político. Una verdad espiritual puede aplicarse de muchas maneras en nuestra vida. No nos perderemos la inspiración de la revista si buscamos ideas espirituales para nutrir nuestra oración por nosotros mismos y por el mundo.
Cualquiera sea la cantidad que leamos, descubriremos ideas maravillosas para usar y compartir, sin sentir ninguna culpa por lo mucho o poco que hemos leído. ¡Esta es una promesa!
Susan Stark
Gerente de Redacción